La nueva Ley de Cobranza Delegada es una “tienda de raya disfrazada” que pretende dejar en la indefensión a los trabajadores y jubilados que acceden a créditos, mediante el descuento directo de sus cuentas de nómina, señaló la representante del Barzón de Resistencia Civil, Teresa Carbajal.
“Marca sin duda un gran retroceso en materia de derechos humanos y nos acerca no por mucho a las llamadas tiendas de raya que se usaban durante el Porfiriato y pretende ser el nuevo Fobaproa con el que se rescate a los bancos a costa del salario de los trabajadores”.
Durante una reunión con diputados federales en la Cámara Alta, dijo que la modificación de la Ley Financiera, la Ley de Títulos y Operaciones de Crédito son un golpe a la clase trabajadora porque se les descontaría directamente de su nómina el pago de los créditos que hayan contratado.
“El patrón de manera periódica e ininterrumpida descontará el pago del prestamista, ello significa que el salario dejará de tener la protección constitucional para convertirse en una cantidad cualquiera que puede ser tomada como fuente de garantía para el pago de créditos”.
Advirtió que renunciar a un proceso legal para sujetarse a una esclavitud por deudas, le creará indefensión, ilegalidad y abusos; señaló que la figura ya existe en Veracruz y miles de trabajadores viven una “sangría” en sus nóminas.
“El gremio magisterial representa más de 2 mil 23 afectados con esta práctica, 4 mil 474 jubilados del IPE viven esta problemática e incluso el IPE se beneficia con el 5 por ciento mensual del pago que los trabajadores aportan sobre capital e intereses. Alguien que contrata un crédito de 20 mil pesos termina pagando 70 mil pesos, esto es usura”.
Teresa Carbajal señaló que permitiría embargar el salario e incluso a los empleadores en aquellos casos en que no se hagan los descuento correspondientes.
Al entregar un pliego petitorio , diversas organizaciones exigieron a la Comisión de Hacienda y Crédito Público en la Cámara de Diputados que antes de emitir su dictamen convoque a foros de consulta, gremios patronales y sindicatos; a la Comisión Nacional para la Protección de Usuarios de Servicios Financieros para que dé a conocer las cifras de quejas y abusos financieros por nominaras en todo el país; además, a la Comisión Nacional de Derechos Humanos y los organismos en los estaos que informe cuántos casos reciben de víctimas de cobros excesivos a través de estos mecanismos.
Por su parte, el diputado federal Alejandro Carvajal dijo que el salario no se debe tocar y acusó que la banca rapaz quiere aumentar sus ganancias en contra de la clase trabajadora, de los jubilados y pensionados, además de los trabajadoras, debido a la caída en la colocación de créditos.
Durante una reunión conjunta con el Barzón de Resistencia Civil en la Cámara de Diputados, aseguró que la Ley que se aprobó en el Senado, busca abreviar el proceso de cobro de créditos pero sin la posibilidad de que el trabajador pueda defenderse ante tribunales.
“Quiere abreviar también el método de cobranza para que el trabajador no puede demandar o defenderse en tribunales, quiere eliminar todo tipo de juicios mediante el descuento directo a salarios cual tienda de rayas”.
Agregó que la modificación de la Ley Financiera, la Ley de Títulos y Operaciones de crédito legalizaría la cobranza de los créditos de nómina, a fin de que se puedan descontar directamente del salario a los trabajadores y que los únicos beneficiarios serán los bancos y casas de crédito.
“Son créditos parasitarios y que no generan ningún beneficio y han proliferado desde hace muchos años y han sido un lastre económico para el país y un negocio fructífero que tiene SOMOFES y bancos”.
AVC/Perla Sandoval