La violencia que golpea al estado de Michoacán (al centro oeste de México) amenaza con afectar uno de los principales productos de exportación: el aguacate.
Esta fruta, cuyo “boom” ha generado negocios sustanciosos con Estados Unidos, —se estima que en el Super Bowl de 2020 se consumieron alrededor de 74.000 toneladas— ha traído tensión y crueldad a la región de Tierra Caliente, donde los grupos criminales como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Cárteles Unidos se disputan las zonas.
Los intercambios millonarios y las muertes a balazos han inducido a los productores de aguacate, en los municipios de Los Reyes, Peribán, Tancítaro y Ario de Rosales, a levantarse en armas contra los criminales.
El CJNG es uno de los grupos delictivos que opera en aquellas regiones, y actualmente mantiene un sangriento combate por el control de las tierras con células delictivas locales y autodefensas. Las extorsiones, secuestros y amenazas se han vuelto comunes en ese infierno, donde prospera la fruta convertida en toneladas de guacamole que los estadounidenses disfrutan durante el Super Bowl.
En entrevista con La Silla Rota, un jornalero del sector aseguró que están amenazados por el cártel de las cuatro letras, que irrumpe con extorsiones y asaltos exigiendo una parte de la mercancía. “Queremos que nuestro producto llegue sano y salvo porque nos roban camiones con aguacate y ahí pierde el productor y perdemos todos”, señaló al medio.
La alerta llegó después de varios incidentes que han afectado a la población michoacana. El pasado mes de noviembre, un grupo de delincuentes de Cárteles Unidos llegó a la zona alta de Tepalcatepec. Videos captados por los mismos sicarios mostraron imágenes estremecedoras. Vehículos blindados, cuerpos tendidos, el interminable tabletear de las armas largas y una estruendosa explosión que anunciaría la muerte de varias personas.
El asalto duró varias semanas. Varios días de horror para los pobladores. Hubo muertos y lesionados. Según los medios locales, la mayoría son del bando de Jalisco.
El grupo de Juan José Farías, alias el “Abuelo”, Cárteles Unidos, aplicó su propio protocolo de seguridad: nadie pudo entrar ni salir. La última semana de diciembre, niños, mujeres y hombres encabezaron una columna de autodefensas en Michoacán.
La violencia en la entidad no es nueva, de hecho, fue de los primeros lugares en exportar marihuana gracias a su fértil tierra. Sin embargo, en 2006 la situación se salió de control y el gobernador del estado lanzó un llamado de auxilio al entonces presidente de México, Felipe Calderón (2006-2012) ante la brutal violencia impuesta por Los Zetas, La Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios. La respuesta del mandatario fue desplegar al Ejército y desde entonces no han vuelto a los cuarteles.
Los productores mexicanos del también llamado “oro verde” esperan exportar más de un millón de toneladas a EEUU, un incremento del 4% con respecto a 2020, según la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM, A.C.).