Por meses he sostenido que si Ricardo Ahued no es candidato de Morena a la alcaldía de Xalapa, los miembros de ese partido ya podrán ir a bailar a Chalma que ni así repetirán su triunfo del 2017. El deplorable trabajo del alcalde Hipólito Rodríguez Herrero pesará como una docena de ladrillos sobre la espalda del elegido.
Aunado a lo anterior, Morena carece de un aspirante que garantice el triunfo. Ni Dorheny García, ni Rosalinda Galindo, ni Ana Miriam Ferráez están en esa tesitura. Y Juan Vergel… menos.
Cualquiera de los cuatro será avasallado por la oposición y tan lo saben en Morena, que andan en busca de un candidato externo, porque la orden de Palacio Nacional es conservar Xalapa a como dé lugar.
En algunas encuestas publicadas en diciembre sobre posibles candidatos, apareció el nombre de Elizabeth Morales García que ya fue alcaldesa de Xalapa, diputada federal, Presidenta estatal del PRI y Delegada de PROFECO y del ISSSTE en Veracruz.
Bastó su nombre en las encuestas lector, para que se alborotara la gallera. Y a partir de ese momento ha sido ligada a Morena como la futura candidata a la alcaldía de Xalapa por ese partido.
¿Qué tan cierto es esto?
En entrevista que le hicimos mi compañero y amigo Quirino Moreno y este servidor, la mujer no soltó prenda. Aunque admitió que ha recibido propuestas, dijo que le gusta analizar las variables favorables y desfavorables antes de tomar una decisión.
Pero de buena fuente sé que un grupo poderoso de Morena le ofreció la candidatura y ese grupo está tratando de convencer a los otros de sumarse al proyecto.
El hecho de que Elizabeth sea posible candidata no sólo le meterá ruido a la contienda, sino que ya le metió un calambre a los partidos de oposición, principalmente a la alianza PAN, PRI y PRD. Y es que por su palmarés y experiencia, Morales García sería una aspirante de peso y con reales posibilidades de ganar.
El problema es que a pesar de que en Morena saben que ni fundiendo a sus aspirantes harían uno con la suficiente fuerza para ganar en Xalapa, siguen enredados en su laberinto y se empeñan en ir con uno de los “suyos” en las boletas.
En ese sentido quienes están a favor de una candidatura externa, deberán tejer fino para convencer a los recelosos de que la única vía para seguir conservando la capital de Veracruz es un candidato o candidata de fuera. Y si esa candidata se llama Elizabeth Morales García sus posibilidades de ganar crecerán exponencialmente.
Sin duda su mejor carta de presentación es y será la obra que hizo en la ciudad. Y no hablo de calles pavimentadas, mejor alumbrado público o escuelas rehabilitadas, sino de la obra en su conjunto. Durante la administración de Elizabeth, Xalapa se transformó en una ciudad realmente guapa.
Recapitulando; la orden de arriba es que Xalapa siga siendo de Morena, pero Morena no tiene gente para ganar. La solución es un candidato externo que puede ser Elizabeth Morales que hizo un extraordinario trabajo como alcaldesa y eso nadie se lo puede soslayar.
Pero si los duros de Morena se empeñan en imponer a uno de los suyos (o suyas), que le digan adiós a Xalapa y al proceso de transformación de la 4T en la capital del estado.