“No aceptamos ese tipo de proyectos, no vamos a ser cómplices” afirmó Hipólito Rodríguez Herrero, era la mañana del 9 de octubre del 2017, el alcalde electo de Xalapa se manifestó en los bajos de palacio municipal, con un reducido grupo de ciudadanos, para reclamar al gobierno estatal y municipal el haber dejado a la empresa Gas Natural del Noroeste comenzar la instalación de un gasoducto.
Con el ánimo hasta el tope, Rodríguez Herrero declaró aquel día a los medios de comunicación que “el área por donde quieren atravesar el gasoducto es un área densamente poblada, hay muchísimas escuelas. Poner un gasoducto en esta área es riesgo. Es fundamental que le consulten a la población si quieren vivir con ese riesgo”. Y para rematar, sin saber que sobre ese tema hoy daría una maroma, dijo que debería hacerse una consulta ciudadana sobre el asunto.
Una de las preocupaciones principales del hoy Alcalde de Xalapa ha sido el cuidado del medio ambiente, y en eso le reconocemos su constancia y valor para resolver, en favor de todas y todos, asuntos como el del relleno sanitario de El Tronconal. En aquel tiempo de lucidez, Hipólito dio cátedra y, con ese estilo aleccionador que caracteriza a muchos empoderados de la 4T; aseguró que se oponía al proyecto en cuestión porque se debería transitar a las energías renovables en favor de mitigar el cambio climático, además de mencionar que detrás de todo había opacidad y corrupción. Advirtió que el 1 de enero de 2017, cuando él asumiera la alcaldía, convocaría al cabildo para cancelar la concesión en favor de Gas Natural del Noroeste.
“Si aceptamos someternos a una tecnología como el gas natural significa que estaríamos encadenados a los gases fósiles. Xalapa debe de apostar por energía renovable. Es aceptar el pinchazo de una persona que nos vende una droga. Atarnos por más de 30 años al uso de energías que son nefastas.” Así terminó de tundir al gobierno de Miguel Ángel Yunes, al entonces Presidente Municipal Américo Zúñiga y, de paso, a Julen Remenetería quien en ese tiempo era titular de la SIOP.
Total que la tan cantada consulta no se hizo, y ya se les olvidó. Al siguiente año de aquella escena, ya como alcalde en funciones, volvió a abordar al problema porque los trabajos de introducción del ducto no paraban, y ya existía mucha presión de sectores de la sociedad xalapeña. Su enfoque era el mismo, y volvió a señalar el costo para el medio ambiente que conlleva seguir dependiendo de un combustible como el gas; además informó que ya había manifestado su desacuerdo a la empresa durante el último encuentro que hubo entre la autoridad municipal y Gas Natural del Noreste.
Ese Hipólito del 2017 fue desaparecido por el Hipólito del 2020, y para hacer más sabrosa la anécdota, lo hizo delante de representantes de SENDAS A.C. y miembros del proyecto City Adapt de la ONU, dos organismos con un altísimo compromiso con el medio ambiente, con quienes el Gobierno Municipal de Xalapa desarrolla una estrategia de captación de agua pluvial y que fue presentada en la colonia el Naranjal; ahí, cuando los medios abordaron a nuestro ecologista alcalde y salió el tema del gasoducto la perspectiva fue diferente. Ahora resulta que “el gas es una sustancia muy útil, estamos a la espera de que la empresa que está atrás de esto cumpla con las reglas”, esas declaraciones quedaron registradas por reporteras y reporteros.
Parece que obligaron a Hipólito a cerrar el tema, a dejar su compromiso como académico y ciudadano en contra del gasoducto; ahora resulta que es cosa de que la empresa gasera cumpla los requisitos técnicos y seguirá el proyecto; no importó el riesgo que tanto se comentó desde hace años, no importó lo que “el Doctor” haya manifestado y señalado en contra de anteriores gobiernos, no importó su reflexión sobre el uso de combustibles fósiles; y lo grave, porque fue un compromiso de él; nunca se cumplió con consultar a la ciudadanía.
¿Qué intereses hay en el gobierno estatal para aprobar esa obra? Es muy preocupante que no se compartan argumentos entre un gobierno municipal y uno estatal que, se supone, avanzan en congruencia por ser de la misma corriente política.
Nuevamente no lo ayudaron, lo dejaron sólo, o quien lo asesora no dimensiona las implicaciones de las palabras de su jefe; igual que en su último desencuentro con los empresarios; almejor salga a corregirse él mismo, a descalificarse por enésima vez y eso vuelva a poner en tela de juicio la continuidad del proyecto morenista al frente del gobierno de xalapa, siempre y cuando no presenten un candidato con los tamaños para dejar en el olvido a Hipólito.