A unos días de cumplir siete meses de pandemia, el sentir de los ciudadanos de la Ciudad de México sobre el hecho de que el presidente Andrés Manuel López Obrador no use cubrebocas es de desaprobación en la mayoría de la población, pues el 77% de los capitalinos reprueba esta conducta por parte del mandatario mexicano, según una encuesta realizada a 400 personas.
Según el estudio del diario El Financiero, el 18% de los encuestados aprueba esta actitud, mientras que el 5% dijo no saber cuál era su opinión al respecto. Cabe recordar que a inicios de mes, el presidente habló de este tema en su conferencia de prensa matutina, en donde explicó que no usa este utensilio porque siempre procura mantener su sana distancia.
Además, sabe que no es portador de COVID-19, pues cada semana se realiza una prueba para detectar la enfermedad; sin embargo, en esa misma oportunidad aclaró que sí lo usaría por respeto a los ciudadanos, quienes lo portan para disminuir el riesgo de propagar la enfermedad.
“Me lo pondría nada más porque veo en la calle la gran responsabilidad de la gente, que aun sin saber a ciencia cierta si ayuda o no ayuda, todos andan con su cubrebocas”, comentó López Obrador para después detallar que no se implementarán medidas autoritarias para contener los rebrotes de coronavirus en el país.
Por otra parte, el ánimo de la población capitalina está dividido, pues mientras el 52% dice sentirse “tranquilo, esperando a que pase el problema”, el 47% de los encuestados contestó que se siente “desesperado y ya no aguanta más” la pandemia.
En este sentido, el de los hombres es el sector que siente mayor desesperación, así como los jóvenes en mayor proporción que la gente mayor; no obstante, el sector de la población que se siente más harto de esta pandemia son las personas con hijos menores de 18 años, aquellos que perciben un ingreso bajo o medio y quienes perdieron su fuente de empleo en los últimos tres meses.
Respecto a cuánto podría durar la pandemia, el 59% de los entrevistados contestó que creen que todavía falta mucho tiempo para que finalice, mientras el 24% cree que todo esto terminará pronto. Cabe destacar que en este tópico hay posturas extremas, pues el 8% cree que la pandemia nunca terminará, mientras que el 7% afirma que ya se acabó.
Otro punto relevante de este estudio es que el 54% de los entrevistados está a favor de mantener las medidas restrictivas y de aislamiento en la capital, mientras que el 44% prefiere la normalidad y la reapertura. Cabe mencionar que este aspecto se ha ido transformando notoriamente desde el inicio de la pandemia. Un ejemplo de ello es que en junio, el 73% estaba a favor de el confinamiento y las limitaciones.
A los encuestados también se les preguntó sobre el contagio de la jefa de gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, y el 72% dijo tener conocimiento de esta situación, pero puntualizaron que no ayuda en el ánimo de los ciudadanos, pues el 44% de la gente se siente insegura ante esta situación.
De acuerdo con las autoridades sanitarias, en México hay 986,177 casos acumulados de COVID-19 y 96,430 muertes causadas por esta enfermedad. En las 24 horas horas anteriores al informe del 11 de noviembre se sumaron 7,646 personas a la cifra de contagios y 588 a la de defunciones.
No obstante, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, dio a conocer que llegaron 7,000 unidades de la vacuna CanSinio Biologics a México, con el fin de que se utilicen durante la Fase 3 de pruebas, en las cuales participarán 15,000 voluntarios.
“Arribaron 7,000 unidades de vacunas de CanSino Biologics para aplicarse de inmediato. 140 millones de dólares se invertirán en la Fase 3 para probar la vacuna”, comentó a través de su cuenta de Twitter, donde recalcó el profesionalismo de la Secretaría de Salud para implementar los protocolos necesarios en la aplicación del medicamento.