Prefacio.
El maquillaje de cifras, los discursos “optimistas”, los auto-elogios, han sido características recurrentes en los discursos del Presidente Andrés Manuel López Obrador cuando se refiere al comportamiento de la economía nacional. *** La mentira, sin embargo, ya no se puede sostener. En su presentación ante los diputados federales de la bancada de Morena, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera Gutiérrez, anticipó que si bien para 2021 se espera un repunte de la economía, el escenario será peor que en 2018 y 2019, porque “ya no habrá guardaditos” y, aunque no se contrate nueva deuda, ésta se incrementará entre 10 y 17 puntos del PIB por efecto del tipo de cambio. *** Y fue lapidario en su pronóstico: “Entre este año y el próximo, México vivirá la crisis más fuerte desde 1932; es casi el peor momento económico para el país en el último siglo”. *** ¿Y el Presidente? ¿Qué opina de eso? *** “En lo económico (…) yo le diría que incluso nos ha ido mejor en cuanto a la estrategia que se aplicó, porque nos estamos recuperando y eso es un hecho, se cumplió nuestro pronóstico de que íbamos a caer y nos íbamos a levantar, que iba a ser una ‘V’. Nuestros adversarios decían que iba a ser una ‘L’, que íbamos a caer y que íbamos a seguir abajo; pues ya no fue así afortunadamente, ya tenemos indicadores que demuestran que estamos saliendo de la crisis económica”. *** “Estamos saliendo con costos bajos porque en otros países aplicaron la estrategia de siempre, de endeudarse para inyectar recursos arriba, a las corporaciones. Nosotros no nos endeudamos y con una política de austeridad, apretándonos el cinturón, el gobierno se apretó el cinturón, no como era antes, que siempre se le pedía al pueblo que se apretara el cinturón, y logramos liberar fondos para apoyar abajo de manera directa”. *** Tiene que admitir, sin embargo, que crecerá la deuda: “Nuestra deuda va a subir porque hubo una depreciación del peso por la crisis -que por cierto ya el peso se está apreciando, llegó a estar a 25 pesos, un poco más, por dólar, la semana pasada ya bajó de 22 pesos por dólar, estamos hablando de tres pesos, eso es recuperación-. De todas maneras, estaba en 18, 19, para 22; entonces, como la deuda está contratada en dólares, nos afecta en cuanto al incremento de la deuda, por esa razón, y también por la caída en la economía, pero no se contrató deuda adicional”. *** ¿A quién le creemos? ¿Al especialista, o al Mesías?
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Lo habíamos advertido hace más de un año, en el mes de junio del 2019:
Que el consorcio constructor Mota-Engil estaba pasando por encima de las leyes de este país y alterando el equilibrio ecológico en el trazado de la autopista Cardel-Poza Rica.
“Este consorcio tiene una política empresarial muy parecida a la que emplea la brasileña Odebrecht, y en cada país al que llega muy pronto se le conocen manejos turbios. En México, durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, Mota-Engil obtuvo contratos que produjeron un escándalo de corrupción por más de 13 mil 600 millones de pesos mexicanos con la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT). De acuerdo con un análisis de Compranet y un informe del Instituto Mexicano para la Competitividad, la empresa portuguesa aparece entre las consentidas del gobierno de Peña Nieto”, se advertía en esta columna el año pasado.
“La obra de la autopista Cardel-Poza Rica le fue concesionada a Mota-Engil durante la administración de Enrique Peña Nieto. El proyecto de dicha autopista plantea un trazo que pasa por zonas protegidas debido a su valor ambiental (lo cual es ilegal) y el pasado fin de semana su representante jurídico irrumpió en predios cuyos propietarios mantienen un litigio con el gobierno estatal, que pretendió expropiarlos. Mota-Engil consiguió el apoyo de la policía estatal, pero no presentó documento alguno que le autorizara a operar en una propiedad privada. Atrás de estos apoyos a la empresa portuguesa –dicen- hay fuertes intereses económicos”, afirmaba en aquella ocasión.
La mañana de este lunes, el alcalde de San Rafael, Luis Daniel Lagunes Marín, clausuró los trabajos de la autopista federal Cardel-Poza Rica, en el tramo conocido como Paso Largo-Totomoxtle, pues denunció que la empresa Mota-Engil carece de los permisos para realizar dicha obra.
Luis Daniel Lagunes, alcalde surgido de las filas del PRD, denunció que los trabajos de esta empresa han causado problemas a la región, no cuentan con derecho de vía, tampoco permisos de construcción, ni estudio de impacto ambiental, ni dictamen técnico de Protección Civil.
La autoridad municipal resolvió intervenir y suspender los trabajos, toda vez que Mota-Engil no cumplió con los acuerdos suscritos y afectó los caminos que enlazan varias comunidades, al romper calles pavimentadas y drenajes.
Explicó que en meses pasados, la empresa se había comprometido ante autoridades ejidales y municipales, a reparar los desperfectos que causara durante la realización de la obra, pero no lo hizo y ahora ha puesto en riesgo de inundación a la población de Paso Largo.
Por ello, el alcalde advirtió que la obra estará cancelada hasta que la empresa muestre las constancias de que no se afecta a terceros y que cumple los compromisos firmados.
“Seguirá parada la obra hasta que nuestra gente tenga la seguridad de que no quedarán como zona de alto riesgo por las crecientes del río Bobos y de los arroyos de respuestas rápida y que de no hacer las adecuaciones firmadas, nuestra gente quedaría expuesta a las inundaciones”.
Y a final de cuentas, la familia Spinoso tenía razón.
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Epílogo.
La Secretaría de Salud federal informó este lunes que en el país se han registrado ya 64 mil 414 defunciones a causa de Covid-19. El Director de Epidemiología, José Lus Alomía, dio a conocer que desde el inicio de la pandemia en México se tiene un acumulado de 599 mil 560 casos positivos a esta enfermedad. El funcionario informó, además, que hasta este domingo se han recuperado 416 mil 738 personas tras sufrir el padecimiento.