Los aliados del presidente Andrés Manuel López Obrador en Veracruz parecen olvidar que lo que en 2018 llevó en su tercer intento al tabasqueño a la Presidencia de la República fue el hartazgo de los mexicanos por la corrupción de las administraciones anteriores del PRI y PAN.
Y entre esas repudiadas prácticas corruptas de ex gobernantes priistas y panistas estaba por supuesto el nepotismo que no se limitaba sólo a colocar a familiares en puestos de la administración pública o en cargos de elección popular sino que también incurrían en el tráfico de influencias para beneficiarlos con todo tipo de contratos, prebendas y negocios.
En la actual administración estatal de Morena ninguno de los tres poderes del Estado ha podido librarse de este nepotismo adictivo, el cual ha quedado evidenciado en la reciente pugna entre el Legislativo y el Judicial.
Pero si la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura del Estado, Sofía Martínez Huerta, ha sido exhibida por su debilidad hacia parentescos políticos y consanguíneos, en el Congreso local el diputado Juan Javier Gómez Cazarín, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), tampoco ha podido vacunarse contra este contagioso vicio del poder.
Este sábado, por ejemplo, uno de los hermanos de Gómez Cazarín difundió en las redes sociales un video donde es inyectado el presidente de la Jucopo en su oficina de la LXV Legislatura del estado, lo que desató todo tipo de críticas contra el diputado nativo de Hueyapan de Ocampo. Una de ellas provino del diputado federal del PRI, Héctor Yunes Landa, quien tuiteó: “Entre los posibles efectos secundarios de la inyección que recibió ayer @JJavierGomezCa1 está el ‘síndrome del conejo’ y la pérdida temporal de memoria. Quizá por ello olvidó el escándalo de las tres denuncias que hay en su contra ante la FGR a las que tendrá que responder.”
Gómez Cazarín le reviró al ex senador priista: “Diputado @HectorYunes, lamento sus declaraciones hacia un servidor, ya que como es de dominio público, yo no tengo cola que me pisen. No como usted, que la tiene bastante larga. Recuerde que está inmiscuido en el tema de Videgaray y Chong. Abrazo fuerte.”
Yunes Landa le replicó: “No suelo debatir con el chiquillaje. Contigo @JJavierGomezCa1 hice una excepción que hoy concluye. Ocúpate mejor de la denuncia en tu contra por fraude, aclara tu participación en el homicidio del periodista Cándido Ríos y atiende tus constructoras. Eso sí es tener la cola larga.”
En efecto, Gómez Cazarín ha sido señalado de recurrir a su influencia política para favorecer a empresas de sus familiares. Desde hace un año, el contratista de moda en Hueyapan de Ocampo, su municipio natal, es casualmente su sobrino Carlos Daniel Cazarín Quevedo, quien ha recibido una serie de obras por parte del Ayuntamiento que preside el ingeniero Jorge Alberto Quinto Zamorano, el cual llegó postulado por Nueva Alianza y el ex diputado ex priista Vicente Benítez pero ahora es incondicional del líder de los legisladores de Morena.
Y hace tres semanas contratistas que concursaban en la Licitación Pública Nacional número LO-930007995-E71-2020 de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP) para la construcción de 3.5 kilómetros del camino Sontecomapan-Montepío, en el municipio de Catemaco, filtraron que el diputado de San Andrés Tuxtla pretendía favorecer a la Constructora TERCO, S.A. de C.V., de los hermanos Héctor Enrique y Christian Julián Cazarín Meza, a los que el presidente de la Jucopo reconoció públicamente como sus familiares.
Por si fuera poco, ahora hasta don Juan “Yona” Gómez Martínez, padre del diputado, anda gestionando obras y repartiendo apoyos del Gobierno del Estado en las comunidades de Hueyapan de Ocampo, lo que hace suponer a los adversarios políticos del legislador que estaría perfilándolo para la sucesión municipal del año próximo, no obstante sus malos antecedentes como ex tesorero de ese ayuntamiento, cargo del que fue depuesto hace cuatro años, en diciembre 2016, luego de que cuatro de los cinco regidores lo denunciaron ante el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) y el Congreso local por presuntos desvíos.
Dejan solos a los tucanes
Vaya cubetazo de agua fría que les cayó a varios ex priistas, principalmente a los ex funcionarios fidelistas y duartistas que ya se frotaban las manos porque aspiraban ser postulados a las alcaldías y diputaciones por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en alianza con Morena, lo que prácticamente les aseguraba el triunfo electoral por el arrastre del partido lopezobradorista.
Y es que este lunes, el dirigente nacional del PVEM, Carlos Puente Salas, anunció oficialmente que su instituto político contenderá solo, sin alianzas ni coaliciones con otras fuerzas partidistas en los comicios de 2021, en todo el país.
El líder del partido del tucán dijo que “este escenario lo advertíamos en este espacio, en todo momento”. ¡Sí, ajá!
Lo cierto es que desde hace un mes, el dirigente interino de Morena, Alfonso Ramírez Cuellar, ya había externado que su militancia estaba manifestando su rechazo a una potencial alianza con el PVEM, partido que históricamente se ha sumado al partido en el poder: primero con el PRI, desde que surgió en el sexenio del ex presidente Carlos Salinas de Gortari; luego con el PAN, durante el mandato de Vicente Fox Quesada, y recientemente con el partido tricolor en la presidencia de Enrique Peña Nieto.
Ya se verá en el proceso electoral de 2021 cuál es el peso real del PVEM en el país y en Veracruz, donde la franquicia partidista es regenteada por fidelistas y duartistas como Marcelo Ruiz, Javier Herrera Borunda, Alberto Silva Ramos y otros que, como el ex dirigente priista Jorge Carvallo Delfín, siguen operando ambiguamente desde el partido tricolor.