“No es lo mismo los polvos del Sahara, que los polvos de Sara”. Arias

No muy buen empresario, el inexplicablemente senador por Morena, Ernesto Pérez Astorga (le decían en la secundaria Pereza Estorba), durante su corta participación en la política nacional nos dejó un recuerdito a los pobres ciudadanos: encarecer las medicinas.

Esto, mediante la iniciativa para conformar una nueva Ley de Protección a la Innovación Industrial, que presentó a finales de 2019, la cual ha creado opiniones muy significativas y discordantes dentro del Senado mexicano y ha llegado hasta la Comisión de Economía que preside el viejo panista Gustavo Madero.

Entre las ideas principales de lo que implica la iniciativa está la de multiplicar las ganancias económicas de las multinacionales al elevar el costo de las medicinas para todo el público, ya que no se podrían producir medicamentos genéricos baratos, al alargar indebidamente por muchos años más el monopolio de las patentes.

Además, más de 60 laboratorios mexicanos serían limitados para poder invertir en la fabricación de genéricos, lo que vendría a sumarse al aumento del desempleo y la violencia, y a detener el avance de la investigación científica.

Pérez Astorga también usó la iniciativa falsamente con el pretexto de que servirá para adecuarse al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, lo que viene siendo una pinochezca mentira, pues ya fue modificado el capítulo en que se extendía la protección de patentes, el cual además había tenido la aceptación gubernamental.

Para ver las cosas con claridad, el destacado periodista Mauricio Flores, en reciente artículo, apunta que los medicamentos genéricos han logrado reducir en un 80 por ciento los precios de productos sumamente necesarios e indispensables para mejorar la salud de los ciudadanos, como son los elaborados contra diabetes, colesterol y triglicéridos elevados, hipertensión, oncológicos, virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), antibióticos, desordenes maniaco-depresivos y epilepsia.

Con tan torpe iniciativa pérezastorgiana, que dañaría enormemente la ya raquítica economía ciudadana, al detenerse la producción de genéricos también se llevaría entre las patas al Seguro Social y al ISSSTE, y encarecería el costo de la salud de todos los mexicanos.

El destacado comunicólogo, experimentado comentarista en medios, Rafael Pérez Cárdenas, en su columna “De razones y pasiones”, avizora con sagacidad periodística una simple posibilidad: la presunción de un negocio multimillonario.

Ante está enfermiza iniciativa del exsenador Ernesto Pérez Astorga bien podría empezar a fabricarse su botarga del Doctor AntiSimi.

Ahued los pone a temblar

La presencia de Ricardo Ahued en Xalapa ha puesto nerviosos a los sistemas internos del Palacio de Gobierno, pues el fantasma de una probable separación del cargo de Cuitláhuac García Jiménez, renace nuevamente

El fin de semana se difundió una nota periodística, en portales informativos y en redes sociales, en la que se aseguraba que un enviado del más alto círculo del Gobierno Federal llegó exprofeso a Xalapa a sostener una reunión privada con el senador Ricardo Aheud Bardahuil, hecho que encendió las alarmas en el Palacio de Gobierno.

La supuesta reunión se habría llevado a cabo en un hotel de la carretera Xalapa-Veracruz y fue demasiado exclusiva; el enviado de la Ciudad de México solamente habría llegado para entrevistarse con Ahued y, de inmediato, retornar a la capital del país.

La reunión causó movimiento al interior de diversas oficinas de Palacio de Gobierno, que aún no se reponen del golpe mediático que generó la entrevista que brindó in situ el presidente del Senado Ricardo Monreal al periodista más confrontado con Andrés Manuel López Obrador, Carlos Loret de Mola, en donde el senador morenista con todas las letras aceptó que Cuitláhuac García Jiménez, Miguel Barbosa y Cuauhtémoc Blanco, gobernadores de Veracruz, Puebla y Morelos, son un lastre para los proyectos políticos de su Partido.

Como se puede advertir, el texto carece de rigor periodístico, se apoya solo en rumores y en la entrevista que concedió el presidente del Senado Ricardo Monreal, uno de los políticos más cercanos al presidente López Obrador, a Carlos Loret de Mola. Lo que es un hecho es que de aquí a que lleguen los últimos días de noviembre habrá filtraciones de este tipo a pasto.

Benítez, de millonario a prófugo

El destino de Vicente Benítez no podía ser otro. Lo vimos llegar a la secretaría de Finanzas como colaborador del subsecretario Javier Duarte, trasladándose en un modestísimo vehículo azul oscuro. Más tarde, cuando Duarte, a quien cultivó con una actitud salamera y labiosa, llegó a la gubernatura, lo nombró Tesorero teniendo la escuela de Carlos Aguirre, el gran corrupto del sexenio fidelista, e hizo lo que aprendió: disponer de los recursos públicos para su peculio.

Pero su novatez lo llevó a cometer un error de primaria, el gobernante le ordenó enviar a la ciudad de México 25 millones de pesos en efectivo y entregarlos a un dirigente del PVEM, y Chente, que se creía dueño del país, los mandó con un propio en un helicóptero que bajó en el aeropuerto de Toluca donde lo interceptaron miembros del Ejército y les aseguraron el valioso cargamento.

Pero ese incidente no le retiró la confianza de Duarte a Vicente, al contrario, le hizo encargos, de los más delicados, en los que se trataba de manejar dinero en efectivo como por ejemplo en épocas electorales. Vicente se instalaba en una casa propiedad del narco Francisco “Pancho” Colorado, allá por el rumbo de la CMAS en la avenida Miguel Alemán, donde repartía recursos a manos llenas a los candidatos del PRI para sus actividades electorales.

Luego lo nombró Oficial Mayor de la SEV de donde extravió cinco mil millones de pesos y terminó como administrador de la Sedesol veracruzana, desde donde operó, tras crearlas, empresas fantasmas que le sirvieron a Duarte para sus corruptelas y a Vicente para llevarse parte del dinero que, aclaramos, eran miles de millones de pesos.

Con Miguel Ángel Yunes Linares, la leyenda urbana dice que se puso a mano para que no lo procesara, es más, hasta lo hizo diputado local para que tuviera impunidad y ahí se la llevó, pero ahora con la 4T se topó Vicente Benítez González, le han liberado una orden de aprehensión en su contra por su probable participación en el delito de peculado, enriquecimiento ilícito, asociación delictuosa, y desvío de recursos públicos. Se habla que el delito de peculado por el cuál se le imputa el delito podría rondar los Mil millones de pesos y de que junto con él van cuando menos seis cómplices. Tenía que ser.

Por lo visto, la impunidad se le acabó y ahora la Fiscalía General del Estado así como la Fiscalía General de la República van por su cabeza dentro del proceso legal que se le persigue a Javier Duarte de Ochoa, para dar con sus principales operadores financieros que en conjunto desviaron un total de 50 mil millones de pesos del erario público de Veracruz.

Más historias de corruptos

Muchos simpatizantes de Morena, que votaron en la pasada elección por los candidatos de ese partido, empezando por el presidente Andrés Manuel López Obrador, desconocen el origen partidista y de corrupción que tienen los colaboradores de AMLO. Y para muestra un botón. Alfonso Durazo Moreno, Secretario de Seguridad Nacional, renuncia al PRI en mayo de 2000 y sorprendentemente ingresa al PAN nada más y nada menos que como Secretario Particular de Vicente Fox Quezada; ¡Sí, secretario particular!, la posición favorita de él y de Salinas que seguía siendo quien movía los hilos de la mafia del poder.

Ese mismo año, Genaro García Luna es nombrado Coordinador de Inteligencia de la Policía Federal de la Secretaría de Gobernación.

En 2001, El Chapo Guzmán se fuga del penal de máxima seguridad de Puente Grande, en Jalisco, con ayuda de policías federales, custodios y director del penal, todos ellos dependientes de García Luna, su jefe inmediato y a su vez todos ellos al mando del entonces Secretario de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero, actual Fiscal General de la República en el gobierno de la 4T de AMLO (ya comienza a ponerse buena la cosa)… como premio, García Luna es subido de rango y es nombrado titular de la desaparecida AFI (Agencia Federal de Investigación).

Aquí es cuando las palabras del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador toman fuerza: “El Presidente de México se entera de todo y no hay un negocio jugoso que se haga sin el visto bueno del Presidente. Para que quede claro: si hacen una transa grande, grande, grande, es porque el presidente lo permitió”… tomando como ciertas sus palabras, caemos en la afirmación de que la fuga del Chapo fue negociada, todos sabían, Fox, García Luna, Alfonso Durazo y Gertz Manero, los dos últimos, piezas claves en aquel entonces y que hoy tienen mucho poder en el gabinete de AMLO. ¿Cómo la ven?, y esos son solo dos de todos los del gabinete que también tienen sus historias muy parecidas a las anteriores.

Reflexión

Muy lamentable que tras 22 años de dar servicio, de primera, en el restaurante Las Coronelas, propiedad del empresario xalapeño Ernesto Aguilar Yarmuch, haya tenido que cerrar por el asunto de la pandemia y por la falta de apoyo oficial; apoyo que no han tenido los empresarios veracruzanos para evitar cierres como este y despidos de personal que se queda sin chamba. Vamos en picada.

Escribanos a mrossete@nullyahoo.com.mx | formatosiete@nullgmail.com.mx