“La visita de AMLO a Washington es una buena señal para los inversionistas de USA”. Dante Delgado Rannauro
La historia de Ricardo García Guzmán dentro de la administración pública estatal está plagada de traiciones que le han permitido brincar de gobierno en gobierno y, de paso, consolidar un cacicazgo en su natal Pánuco con el apoyo de sus dos hijos: Rodrigo y Ricardo García Escalante. Entre los tres, padre e hijos, han sido presidentes municipales, diputados locales y diputados federales, por los partidos PRI, PAN y ahora van por Morena.
Muy joven, Ricardo llegó a Xalapa a inscribirse en la carrera de contador público en la Universidad Veracruzana. En la capital del estado rentó primero un cuarto en la colonia Pumar y más tarde se cambió a otro en 20 de Noviembre, donde tuvo la oportunidad de conocer a la familia Montano. Incluso Ricardo, sostuvo un noviazgo con Juana, una de las hermanas de Alejandro Montano, que no terminó en matrimonio pero que se quedó en la orillita, a unos cuantos centímetros.
Ricardo terminó la licenciatura en contaduría pública y entró a trabajar en la administración de Maquinaria de Veracruz (Maver), dependiente de la Secretaría de Comunicaciones, cuyo titular era el ingeniero Gustavo Nachón Aguirre, y ahí le agarró la campaña de Miguel Alemán Velasco, con su casi cuñado Alejandro quien lo jaló como miembro del staff alemanista, dejando un faltante, en la administración de Maver de más de 40 mil pesos, su primer acto de corrupción el cual ni siquiera trascendió por la importancia que tenía quien lo invitó a la campaña. Tanta, que lo hizo Contralor General del Estado y fue Ricardo quien extendió las actividades de esa dependencia a todas las oficinas del Ejecutivo donde, con despachos propios, practicaba auditorías con mucha frecuencia lo cual convirtió en el gran negocio y mostró su enorme creatividad para obtener dinero público triangulándolo mediante empresas privadas.
Termina el sexenio de Alemán y el más beneficiado de ese grupo es Ricardo García Guzmán, quien decide invertir en política. Se entrevista con el nuevo gobernador, Fidel Herrera Beltrán, le entrega toda la información confidencial que tenía del alemanismo y se engancha. Con El Tío Fide fue fácil negociar, o comprar, la alcaldía de su natal Pánuco, Ricardo García Guzmán se fue y comenzó a construir un cacicazgo que a la fecha continúa.
“El Ñoño”, como es conocido entre la flota del fut, amigos de la juventud con los que participó en varios equipos con bastante éxito por cierto pues era muy requerido gracias a su gran habilidad como centro delantero, regresó como diputado local y más tarde siendo gobernador Javier Duarte de Ochoa lo nombra, por segunda vez, Contralor General del Estado y cuando se destapa la cloaca en contra de los duartistas
García Guzmán, en un clasico acto de traición y para quedar bien con Miguel Ángel Yunes Linares, candidato del PAN al gobierno, señala a los culpables del gran desfalco de la administración pública que todavía no termina y que comenzó con la llegada de Javier Duarte a la gubernatura. Él mismo se acredita como instrumento legal que permitió se investigara y procesara a Gabriel Deantes Ramos y a Arturo Bermudez Zurita, los dos colaboradores más cercanos de Javier Duarte. Con eso y con más información que le entregó a Yunes Linares, Ricardo volvió a brincar de una administración a otra, ahora del lado del PAN con Yunes.
Con el ojo puesto en Morena
Pero el clan de los García de Pánuco no está satisfecho, más que dinero, que les sobra, lo que quieren es continuar en el poder, por eso el diputado local Rodrigo García Escalante ha traicionado a la bancada del PAN en la que estaba y se ha refugiado en la de Morena, entregando su voto en las ultimas decisiones importantes con tal de ganarse la buena voluntad de la 4T en el poder.
En el diario La Jornada, en una columna titulada “La Faena” y firmada por la redacción, nos proporcionan datos muy interesantes en torno a esta familia. Dice mas o menos este trabajo periodístico: Lo que pasó el fin de semana en Pánuco durante la gira del gobernador Cuitláhuac García, no es una buena señal para la familia de Ricardo García Guzmán, y otros con similares perfiles señalados por actos de corrupción, y por las relaciones peligrosas que buscan reciclarse en medio de las alianzas que el partido gobernante está planeando formalizar. Por eso adquiere relevancia la ingenua pasarela preelectoral que realizó el secretario de Gobierno, Éric Patrocinio Cisneros, un día antes de la gira del mandatario.
Resulta que antes de la llegada del gobernador, el ansioso secretario de Gobierno encabezó en Pánuco el importantísimo e innovador arranque del programa de Reposición de Actas de Nacimiento «Huella Veracruzana», acompañado por el yunista y ahora ex panista, diputado local, Rodrigo García Escalante, con quien Éric Patrocinio se dejó ver por las calles panuquenses con el exalcalde y orgullo del nepotismo de la familia García, en una suerte de paseíllo revelador de algunas conjeturas. De entrada, se podría entender la embarcada que se dejó pegar Éric Patrocinio de dos maneras. O es por su consabida ignorancia del contexto político e histórico del norte del estado –hay que recordar que su veracruzanismo se sostiene por el acta de nacimiento de Oteapan, la presentación de un libro, sus constantes alusiones y viajes al sur de la entidad, y un falso acento cuenqueño–, lo cual haría pensar que mordió el anzuelo seductor del yunista y se prestó a bendecir la llegada de los García al redil morenista, luego de que el diputado chaqueteara con su voto al blanquiazul y aprobara la reforma electoral.
La otra posibilidad es que en su carácter de encargado de la política interior y con voz influyente en la selección de candidaturas a las alcaldías y diputaciones locales del año entrante, se haya dejado «trabajar» y «sensibilizar» por el método que los caciques panuquenses han venido utilizando con el gobernante en turno, desde Fidel Herrera y así puedan influir regionalmente en la repartición de cargos de elección popular. En tal caso, el pago por el voto de Rodrigo podría resultarle muy costoso a Morena, dado el enorme desprestigio del que goza y su agotamiento tras años de manipulación y abuso del erario municipal.
Le tomaron “la plaza” a don Eric Patrocinio
Para sorpresa de Eric el ansioso, esa misma noche, la ayudantía del gobernador y la Guardia Nacional tomaron el control de la agenda y recorrido del mandatario de todos los lugares en donde iba a encabezar eventos públicos. Todo esto con una clara finalidad: detener el acoso previsible del clan García al gobernador y dar rienda suelta a su codicioso afán de por mantener el control del municipio. Los cuitlahuistas limpiaron la Casa de la Cultura donde años antes la familia había hecho el mismo show a Javier Duarte y luego a Miguel Ángel Yunes Linares, con bailes folklóricos, desfile de niños vestidos a la usanza regional, guayaberas y huapangos.
Esa noche, la orden fue: todo lo que huela a García debe ser expulsado del lugar y solo se permitirá la presencia de la directora de la Casa, Linda Robles. Tanto la Tesorera Municipal, Carolina Dulce Navarrete, regidora municipal con los dos Ricardos, el papá y el hijo, cuando ocuparon la presidencia respectivamente y los García fueron corridos vergonzosamente del lugar. Cuitláhuac demostró carácter y conocimiento político del municipio y no se dejó cooptar o intimidar, según sea el caso, pues a diferencia de Javier Duarte pero sobre todo de Yunes Linares, Cuitláhuac tomó distancia de la famosa familia caciquil. Fue un mensaje claro: “no somos lo mismo, y ni siquiera les permitió se acercaran a tomarse la foto con él como es su costumbre. El banquete y todo lo que habían preparado los García se les quedó.
En el pasado proceso electoral la familia apostó todo su capital político y económico a favor del hijo de Yunes Linares (lo que ignora Eric Cisneros) quien perdió frente al morenista Cuitláhuac García, pero fieles a su lógica política ahora tratan de afiliarse a Morena para continuar al frente de su cacicazgo.
En calidad de mientras, los García ya cuentan con un voto, el de Eric Patrocinio Cisneros Burgos. Ahí la llevan, no hay que descartarlos a la primera de cambio, son la maña andando.
Reflexión
Se liberó una orden de aprehensión en contra del exfuncionario duartista y uno de los principales operadores financieros de ese sexenio, Vicente Guillermo Benítez González “El Chileno”, por su probable participación en el delito de peculado, enriquecimiento ilícito, asociación delictuosa y desvío de recursos públicos, delitos que podrían rondar los mil millones de pesos. Doble contra sencillo a que no lo atrapan, Vicente debe estar en algún lugar del mundo disfrutando lo robado y alejado del brazo de la justicia.
Escribanos a mrossete@nullyahoo.com.mx | formatosiete@nullgmail.com.mx