Tras las críticas vertidas a la propuesta que resultaba inconstitucional, la diputada local, Cristina Alarcón Gutiérrez, retiró su iniciativa que impedía el uso de la voz a legisladores que, durante la discusión de algún asunto, difamaran, calumniaran u ofendieran a alguno de sus homólogos o a las instituciones.
Mediante un comunicado se informó que la legisladora pidió a la presidenta de la Comisión Permanente de Gobernación, Adriana Paola Linares Capitanachi, se dejará sin efecto su propuesta para modificar el reglamento del poder legislativo.
“Me dirijo a usted para solicitar el retiro de la propuesta en los términos presentados. Mi intención nunca fue la de callar las voces de mis compañeras y compañeros diputados, sino propiciar que en el Congreso se tengan debates serios, con argumentos sustentados en datos veraces», expresó en el documento oficial.
El lunes 22 la diputada local subió a tribuna para presentar la propuesta de reforma que recibió el mote de ley mordaza.
De inmediato diputados de todas las fracciones parlamentarias, incluidos algunos de Morena, consideraron que la propuesta de la legisladora violaba el derecho a la libertad de expresión.
La legisladora planteó que si un legislador que incurriera en una difamación debía disculparse en caso de ser llamado al orden por el presidente de la Mesa Directiva o el de la Permanente.
Sin embargo, en caso de no atender el requerimiento, las expresiones debían ser insertadas íntegramente en acta circunstanciada de hechos y ya no se le concedería el uso de la palabra, en ninguna circunstancia, por el resto de la discusión del asunto objeto de debate.
AVC
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