Ciudadanos de esta capital exigieron a las autoridades preservar y garantizar el estado de derecho, en lugar de tolerar y permitir los actos vandálicos como los del lunes que dejó varios establecimientos dañados y oficinas de gobierno con afectaciones, así como las Iglesias católicas y cristiana.
Los ciudadanos se sorprendieron de ver cómo las secretaría de Seguridad Pública y de Gobierno no hicieron nada para frenar los actos vandálicos, a pesar de que vieron como los jóvenes encapuchados y vestidos de negro arremetían contra la torre de SSP.
En locales del primer cuadro de la ciudad los empleados de las tiendas y trabajadores de aluminio, y cristal comenzaron a hacer las reparaciones de los daños a las fachadas que provocaron los jóvenes encapuchados el día lunes, bajo el supuesto de que protestaban por la violencia.
AVC
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