Las frutas y verduras que se les quedan a los productores en las huertas porque su tamaño es pequeño o alcanzaron su grado máximo de maduración, pueden recolectarse, y entregarse a familias de escasos recursos para su alimentación, propuso la directora de Agronegocios de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural, Pesca y Alimentación (Sedarpa) Liliana Ramos Rivera.
Afirmó que han encontrado personas que llevan hasta dos días sin comer, y según estudios del Consejo Nacional de Población (Conapo), Xalapa es una de las ciudades con mayor pobreza urbana a nivel nacional, “que vivas en una ciudad, no significa que no haya colonias pobres”.
Explicó que hay frutas y verduras que se echan a perder en las mismas fincas, porque los productores no encontraron un lugar donde venderlas, les quieren pagar las toneladas en precios “muy baratos”, o porque el tamaño es pequeño, y así no lo aceptan en los mercados.
“Por ejemplo, les quiero pedir a los productores de mango que lo que no salga a venta porque es mango chiquito lo donen a bancos de alimentos, no porque sea mala calidad, sino porque es pequeño, que no haya desperdicio” afirmó.
Ramos Rivera refirió que estudios de estadística refieren que la cantidad de alimentos que se van al desperdicio, serían suficientes para dar de comer a las personas que no tienen recursos para comprar en los mercados.
“Hemos encontrado gente que nos dice que lleva hasta dos días sin comer, es increible, eso no puede estar pasando. Es una cadena de consumidor – productor y dar a los bancos de alimentos la producción que se no vende en el mercado y darle a las familias, será mango chiquito, pero es mango”, afirmó.
Citó como ejemplo de las frutas que se echan a perder en las fincas porque no encuentran quién la compre, fue el caso de los productores de mango de Actopan, que en marzo no había comercialización, y por ello la Sedarpa, puso en marcha el programa de Consumo Solidario.
Lamentó que por la falta de mercado las frutas y verduras se tiren, cuando pueden aprovecharse para alimentar a familias, que por la pandemia, su situación económica ha empeorado.
“Es crimen tirar la comida, y también cuando hay tanta hambre en la población” afirmó.