La noche de este miércoles fue asesinado en su domicilio, en el fraccionamiento Floresta, del puerto de Veracruz, el exfiscal boqueño Ángel Fuentes Olivares, (a) El Pato.
El crimen fue resuelto en solo unas cuantas horas, pues la víctima era primo de Manuel Fernández Olivares, (a) El Pámpano, secretario técnico de la Fiscalía General del Estado.
Paradojas de la vida: Hace un par de años, por temor, una de sus víctimas de abuso sexual tuvo que denunciar al “Pato” Fuentes en la Procuraduría General de Justicia del estado de Hidalgo porque en Veracruz, este influyente personaje que se desenvolvía a la vez como fiscal y representante de jóvenes aspirantes a jugadores del club de futbol profesional “Tiburones Rojos”, gozaba de total impunidad.
La denuncia fue presentada en la Procuraduría hidalguense en noviembre de 2018 y el caso quedó registrado con el número 12-2018-17366.
Entrevistado por varios medios, el joven denunciante oriundo del estado de Hidalgo, quien acababa de cumplir la mayoría de edad, relató la manera en que Ángel Fuentes enganchaba a chicos de diferentes partes del país, detallando la red de complicidades dentro del club de futbol propiedad del exdiputado priista Fidel Kuri Grajales, quien tras el escándalo mediático se comunicó con el padre del agraviado para decirle que ningún representante de jugadores trabajaba en su equipo y que tampoco conocía a Fuentes Olivares, pero le pidió nombres para hacer una investigación y le ofreció que llegaría “hasta las últimas consecuencias contra este tipo de mamadas que hacen”.
“Tengo hijos, por eso le estoy hablando. No me gustan este tipo de cosas. Imagínese, yo le meto un tiro a ese cabrón. Así de fácil. Yo lo entiendo”, le habría dicho el político y empresario orizabeño al padre de la víctima, según la versión de éste.
Por estos hechos, el club escualo suspendió al entrenador René Isidoro García y a su auxiliar Carlos Cazarín del cuerpo técnico de su equipo Sub 20, quienes –afirmó la víctima–, ignoraban y desesperaban a los jóvenes para que cedieran a la extorsión sexual.
De acuerdo con el testimonio, Fuentes invitaba a chavos a entrenar en los equipos de fuerzas básicas de los Tiburones Rojos y se los llevaba a vivir a casas que él mismo les ayudaba a conseguir. Los muchachos entrenaban pero tenían poca o nula comunicación con el cuerpo técnico. Y cuando expresaban su desesperación por jugar, Fuentes les aseguraba que él hablaría con los entrenadores. Una vez que lograban alinear en uno o dos partidos, “El Pato” les pedía un “rife”, expresión utilizada para no decir explícitamente que debían permitirle que les practicara sexo oral.
Según reveló, la última agresión sexual que sufrió por parte de Fuentes sucedió la noche del 6 de noviembre de 2018 en una casa del fraccionamiento Floresta, al parecer la misma en la que este miércoles fue asesinado el exfiscal.
Describió que en los 40 minutos que estuvo con él sólo pensaba en sus deseos de jugar y en el precio que debía pagar.
Y expresó que muchos soñaban “con matar a ese señor”.
Sayula de alemán, caliente
En el municipio de Sayula de Alemán, según nos comentan, la violencia sigue desbordada.
Este jueves fue ejecutada por un comando armado Silvia Quiñones, hija de la síndica de ese municipio del sur del estado, Claudia Quiñones.