El Equipo México del proyecto COVIDiSTRESS, en el que participan Claudio Rafael Castro López y Rubén Flores González, del Centro de Estudios de Opinión y Análisis (CEOA) de la Universidad Veracruzana (UV), realiza una etapa de difusión sobre la encuesta, a fin de ofrecer una primera panorámica del nivel de estrés percibido en la población mexicana.
Al corte del 30 de abril, fueron respondidos 158 mil 771 cuestionarios a nivel internacional; de esta cifra, seis mil 424 lo hicieron en México, completando más del 80 por ciento del cuestionario, siendo el quinto país con mayor participación en el proyecto.
De acuerdo con los datos recolectados, aunque hubo participación de todos los estados del país, ésta se concentró en Ciudad de México (mil 739), Veracruz (mil 349), Estado de México (606), Jalisco (345) y Nuevo León (243), los cuales acumulan el 66.65 por ciento de los encuestados.
Cabe destacar que los participantes tienen características sociodemográficas que podrían no ser del todo representativas de la población mexicana en general.
En la encuesta se pregunta sobre la situación actual de los participantes durante la pandemia. El 66.5 por ciento reportaron estar en aislamiento, mientras que el 31.3 por ciento dijeron seguir la vida con cambios menores, un dos por ciento sigue su vida sin cambios y el 0.2 por ciento estaba en aislamiento en una unidad médica.
Para medir el nivel de estrés en México se utilizó la versión de 10 reactivos de la Escala de Estrés Percibido, la cual explora aspectos como la falta de control sobre los eventos, presión para remontar las dificultades y sentimientos negativos ante cambios inesperados. El resultado es un número del 1 al 5 que se categoriza por tres niveles, bajo (1-2.4), moderado (2.5-3.7) y alto (más de 3.7).
Con base en lo anterior, el promedio general del índice global de estrés para la muestra mexicana fue de 2.71, lo que corresponde a un nivel moderado de estrés, y un 11 por ciento de la muestra reportan nivel de estrés alto. Las mujeres sufren de mayores niveles de estrés que los hombres.
Con respecto a las fuentes generadoras de estrés, las personas respondieron en qué grado percibían las situaciones de una lista, en una escala del 1 al 6. Los mexicanos reportan mayor nivel de estrés por la economía, el riesgo de contagio por Covid-19, el riesgo de hospitalización, y la preocupación por amigos y parientes que viven lejos.
En la variable referente a la condición de aislamiento, el reporte muestra que quienes reportaron estar en aislamiento perciben mayores niveles de estrés que quienes dijeron seguir su vida sin cambios.
El informe reporta que “el lidiar con niños durante la cuarentena y la educación de los hijos no parecen ser una fuente importante de preocupación. El mayor estresor, la economía nacional, coincide con lo encontrado en el reporte de fuentes de estrés en Europa”.
Ante las preguntas que indagaban sobre la preocupación por las consecuencias del Covid-19, reportaron una mayor inquietud por la familia y el futuro del país.
Asimismo, se presentó a los participantes una lista de afrontamientos, donde los mexicanos reportaron que las actividades que más les ayudan a lidiar con el estrés eran: dedicarse a sus hobbies, interactuar con familia y amigos a distancia, ver televisión y dedicarse a su trabajo. Mientras que la información proporcionada por el gobierno, la religión y los videojuegos, ayudan poco.
En comparación con el resto del mundo, en México el estrés observa un grado moderado. De los países con más de 500 respuestas a la encuesta, Turquía y Brasil muestran niveles de estrés más elevados, mientras que en los Países Bajos su nivel es más bajo.
En el apartado de confianza en las instituciones se formularon seis preguntas para explorar la confianza de los participantes en diversas instancias. Los participantes reportaron niveles altos de confianza en la Organizacional Mundial de la Salud (OMS), la confianza en las instituciones mexicanas va de media a baja: la Secretaría de Salud es en la que más confían y la policía en la que menos lo hacen.
Respecto al cumplimiento de las medidas de distanciamiento social impuestas por el gobierno, se reportaron dos reactivos usando una escala del 1 al 6; se observa que “la mayoría de las personas encuestadas reportan hacer lo posible por mantenerse fuera del espacio público; sin embargo, la confianza en el esfuerzo del gobierno para controlar la pandemia está en niveles medios”.
La encuesta cerrará el próximo 30 mayo, quienes quieran participar pueden hacerlo en el enlace https://bit.ly/3bFNOgF.
UV/Paola Cortés