Alberto Hernández Lozano, responsable técnico de la Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) “La Coruja”, dijo que la observación de aves le ha enseñado que cada especie tiene una función primordial dentro del ecosistema. 

El miércoles 13 de mayo, el biólogo participó en Tardes de Ciencia, programa impulsado por la Dirección General de Investigaciones de la Universidad Veracruzana (UV), que tiene por objetivo difundir el quehacer científico durante este periodo de contingencia a través de la plataforma Cisco WebEx Meetings. 

En la charla virtual “Iniciándonos en la observación de aves”, mencionó que a nivel mundial se tienen registradas aproximadamente nueve mil especies de aves; mientras que en México son alrededor de mil y en Veracruz 699, de acuerdo a la página web eBird México. 

He aprendido la función que tienen en el ecosistema, algunas de ellas (aves) son diseminadores de semillas, otras son controladores biológicos de plagas y algunas son necesarias para otras especies. La observación de aves me sigue haciendo crecer como biólogo, no pasa ni un día en que aprendo algo nuevo.” 

Explicó que esta actividad consiste en observar la topografía de las aves; esto es, mirar todas las partes del animal (nuca, cuello, garganta, tarsos, tibia, corona, que están conforme a cada especie), así como la posición de las plumas en las alas y en el cuerpo, las patas y el pico (se puede inferir su alimento), entre otras características. 

En Veracruz se tienen registradas aproximadamente 699 especies, según la página web eBird

Para iniciar en la observación de aves, enumeró una lista de recomendaciones: una libreta de campo (para anotar lo que vemos, como la actividad del ave), binoculares, cámara fotográfica (profesional o semiprofesional), grabadora de sonido, guías de identificación, ropa de camuflaje, zapatos adecuados, agua y alimentos, repelente ecológico, y tener disposición de tiempo. 

“Va de la mano saber cuánto quieres invertir en tiempo y dinero, para viajar a diferentes sitios de México y a otros países para tener ‘tu primera vez’ que observas un ave; algunas personas coleccionan fotografías, como hobbie, con fines de investigación o para publicar un libro.” 

Dijo que es elemental tener un buen tutor que guíe y ayude a la persona interesada en iniciarse en esta actividad. “Hemos trabajado con niños y nos dimos cuenta que si le dedicas de dos a tres horas puede ser suficiente para avistar aves, pero se debe tener la disponibilidad”. 

Hernández Lozano mencionó que los mejores horarios para hacer observación son a las 7:00 y a las 18:00 horas. Algunos lugares de Xalapa para hacer esta actividad son: Laguna de Miradores, Parque Natura, Los Berros, Los Tecajetes, El Parque de la Señoría, Santuario de las Garzas y Santuario del Bosque de Niebla. 

Al preguntarle si en este periodo de contingencia ha habido un mayor avistamiento de aves, respondió que él ha permanecido en su casa, sólo ha pajareado desde su ventana, ya que tiene un jardín para colibrís, para polinizadores, donde tiene alrededor de 250 especies vegetales, así que los pájaros llegan solitos, sólo tiene que levantarse temprano y observar en silencio. 

Pero algunos de sus compañeros le han comentado que sí han observado más aves, probablemente porque hay menos actividad humana debido a la pandemia por Covid-19. 

UV/Paola Cortés

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