Veracruz, Ver.- La demanda de despensas por parte de familias de escasos recursos se incrementó en un 40 por ciento en el Banco de Alimentos de Veracruz (BAV) por el cierre temporal de los centros de trabajo en la zona conurbada que ordenaron las autoridades sanitarias para evitar la propagación y el contagio del virus que provoca la enfermedad del COVID-19.
Al respecto, el director ejecutivo del Banco de Alimentos de Veracruz (BAV), Darío Jiménez Romero, estimó que unas 300 personas que no estaban incluidas en el padrón de beneficiarios acuden diariamente a solicitar el apoyo de una despensa.
“Se ha incrementado la demanda como en un 40 por ciento, hay gente que la teníamos en el padrón y no asistía o bien gente nueva que se está registrando con nosotros para obtener la posibilidad de una despensa semanal o quincenal o cuando se pueda porque se van escaseando”, expuso.
El entrevistado refirió que las filas para la solicitud de despensas se forman desde antes de las siete de la mañana en sus instalaciones que se ubican en la colonia Pocitos y Rivera.
Darío Jiménez aseguró que se trata de apoyar a todas las personas que acuden a solicitar el apoyo alimenticio.
Sin embargo, Jiménez Romero dijo que el BAV dejó de beneficiar a familias de Alvarado, Lerdo de Tejada, Santiago Tuxtla, San Andrés Tuxtla, Tierra Blanca y Huatusco porque bajó el acopio de alimentos.
En ese sentido, el director ejecutivo del BAV solicitó la donación de alimentos de primera necesidad a las tiendas de autoservicio y empresarios para poder atender las necesidades de las familias de escasos recursos de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
“Nosotros manejamos entre 200 y 300 toneladas al mes, ahorita estamos un poquito menos, casi llegamos a las 200, ha bajado casi una tercera parte, de 300 toneladas que manejamos al mes andamos en unas 200, 250 toneladas; solicitamos a las personas físicas, morales, empresas, personas de buena voluntad que nos donen alimentos de primera necesidad”, finalizó.
AVC