El brazo funcionaría para la toma de muestras en áreas de riesgo o incluso para llegar a zonas de desastre
Por el diseño, construcción y patentamiento de un brazo robótico con capacidad de volar, académicos de la Facultad de Ingeniería de la UNAM recibieron el Primer Premio IMPI a la invención mexicana.

Esta innovación es útil para llegar a zonas de desastre, para auxiliar a helicópteros y aeronaves que se encuentran en sitios de difícil acceso por la altura, para la toma de muestras en áreas de riesgo o rescate, pruebas para métodos de vuelo tridimensional, así como para plataformas de prueba de algoritmos computacionales y de inteligencia artificial.

Julio Alberto Mendoza Mendoza, galardonado junto con Víctor Javier González Villela, explicó que esta idea surgió en 2014. “Es como las extremidades del traje de Ironman, que se desensamblan y viajan de manera independiente”; pero la creación de los universitarios además puede transformarse en un helicóptero o un aeroplano para tener un vuelo más eficiente.

El dispositivo, que incluye un sistema de alimentación de energía similar a un celular, también puede ser utilizado en medios acuáticos y aeroespaciales; su diseño y estructura permiten aprovechar mejor sus fuentes de energía, que también son de bajo costo respecto a sistemas que actualmente son desarrollados en Japón y Corea del Sur.

ADN40

También te puede interesar:

Medicamento contra diabetes promueve reparación del cerebro