Productores de cítricos externaron su preocupación por que ninguna autoridad del gobierno federal y estatal ha dado a conocer un plan emergente que salve las cosechas de la sequía, pues todo el discurso y la atención la centraron en la pandemia del covid-19, sin que nadie se ocupe de la producción de alimentos, indicó el presidente de la Asociación de Cítricos en Álamo, Ricardo Hernández Campos.
Al salir de una reunión con productores, el presidente de citricultores agregó que indistintamente de que el tema vigente deber ser el covid-19, las autoridades del gobierno federal y estatal no deberían dejar de lado la responsabilidad que tienen en producción de alimentos.
“Hay una ausencia muy marcada de autoridades de materia agropecuaria se está ocupando el lente, el foco en atender cuestiones de Salud, y al único que vemos es al secretario de Salud, Roberto Ramos Alor haciendo declaraciones, diciéndonos casos sospechosos, confirmados de covid-19, pero nadie se preocupa por la producción de alimentos, y si no hay comida, y no hay producción, esto se va a colapsar” advirtió.
Expuso que ninguna autoridad de la secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), y ni de la secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural, Pesca y Alimentación (Sedarpa) se les ha visto cerca de los campesinos que en estos momentos de contingencia, deberían considerarlos como prioridad, porque son la gente que trabaja en la producción de alimentos para todo el país.
“Pareciera que nadie considera un plan emergente para atender el impacto económico y social que vamos a tener por la escaza producción que se viene. Los que vemos es que nadie del gobierno del estado o de la federación estén encaminados a atender el campo” señaló.
Hernández Campos señaló que hay una necesidad creciente en el campo de que el recurso público llegue en especie o en efectivo para poder atender la emergencia de la sequía.
Refirió que este año, el único apoyo otorgado por el gobierno federal fue el pago del Seguro Catastrófico con una derrama económica de 34 millones de pesos, en el que al productor que le dieron dos mil 500 pesos por hectárea; y el que más recibió apenas le dieron un monto de siete mil 500 pesos.
“Al que más le dieron fue lo de tres hectáreas igual a siete mil 500 pesos, y el costo de producción por hectárea supera en muchísimo los dos mil 500 pesos, es irrisorio lo que dieron” finalizó.
AVC/Verónica Huerta