Al impartir la plática “Feminismo para principiantes”, el jueves 23 de abril a través de Instagram, Estela Casados González, académica e investigadora de la Universidad Veracruzana (UV), expresó que el feminismo no es moda, es una necesidad que obedece a la problemática tan sentida de que “a las mujeres nos está matando más la violencia machista que el coronavirus”.
Dentro del programa Jueves de Especialistas, organizado por la Unidad de Género de la Facultad de Arquitectura, la Coordinadora del Observatorio Universitario de Violencia contra las Mujeres destacó que tarde o temprano habrá una vacuna para el Covid-19; sin embargo, la violencia contra este género ha existido a lo largo de la historia de la humanidad y también se ha sofisticado.
Por eso, la vacuna contra este fenómeno es el feminismo, es decir, el trabajo que las mujeres realicen para defender sus derechos y su vida.
Durante la plática moderada por Harmida Rubio Gutiérrez, responsable de la Unidad de Género de la Facultad de Arquitectura, Casados González dio a conocer que el concepto feminismo existe desde hace 300 años, de ahí que no sea una moda o que haya surgido de las protestas.
Al respecto, manifestó que poetas y pensadoras de la época reflexionaron sobre el hecho de no ser consideradas con la misma valía o capacidad que los hombres.
En diferentes momentos, tanto en Europa como en Asia, las mujeres cuestionaban el hecho de que como seres pertenecientes a un universo o a una cosmovisión religiosa no fueran consideradas en un primer plano al igual que los hombres, sino por el contrario, fueran refundidas vergonzosamente en un lugar oscuro de la historia.
Al responder la pregunta ¿qué es o no es el feminismo?, Estela Casados explicó que regularmente tiende a escucharse lo que se dice en las redes sociales o en ciertos espacios que no cuentan con información acertada, incluso hay líderes de opinión que en lugar de informar confunden más a la sociedad.
Por ello, es importante establecer un juicio propio y tener elementos para formar un criterio acerca del feminismo.
Compartió con la audiencia virtual de Jueves de Especialistas que su acercamiento con el tema se dio en una comunidad rural donde laboraba como maestra. Las mujeres del lugar se le acercaban para solicitarle consejos y orientación sobre diversos problemas, situación que la llevó a adentrarse en los estudios de género.
Luego, se involucró con un grupo de activistas que defendían y procuraban el respeto de los derechos hacia las mujeres, aunque las leyes lo han instaurado, la realidad muestra todo lo contrario.
“En un primer momento debemos considerar que el feminismo es una acción y propuesta política, cuyo principal propósito es defender y procurar los derechos de las mujeres, que vivamos una vida libre de violencia.
”A esto se suma la libertad de decidir un aborto, de estudiar, no ser observadas de forma lasciva ni permitir el manoseo o toqueteo, que no nos demeriten en el desempeño laboral, intelectual y político, y en otras áreas”, agregó.
Estela Casados habló de la heterogeneidad de las mujeres y de las diferentes maneras de echar a andar propuestas desde cada uno de los feminismos; es decir, existen diferentes formas de llevar a cabo acciones feministas, desde varios contextos y vivencias.
“No es un terreno fácil, es complejo como compleja es la vida y las circunstancias de cada mujer.”
En medio del diálogo y en el marco del Día Internacional del Libro, la especialista recomendó algunos títulos de obras sobre el tema, entre ellos: Cómo informar sobre la violencia machista, de José María Calleja; Los feminismos latinoamericanos ante retos del milenio, de Martha Patricia Salgado, María Luisa González Marín y Patricia Rodríguez López; Un fantasma recorre el siglo, de Gisela Espinosa y Ana Lau Jaiven.
Asimismo, Debates en torno a una metodología feminista, de Eli Bartra; Vindicación de los derechos de la mujer, de Mary Wollstonecraft, y Cuatro vertientes del feminismo en México, de Gisela Espinosa Damián.
UV/Claudia Peralta
También puede interesarte:
HORA LIBRE | Veracruz, entre Covid-19, autoritarismo y olvido presidencial