Veracruz, Ver.-Esther Abigail tiene una rara enfermedad degenerativa que provoca que pierda movilidad hasta dejar de comer o la muerte, por lo que su mamá intenta juntar dinero para pagar un tratamiento que podría salvarle la vida.

La señora Esther Hernandez Zavala, mamá de Esther Abigail, señaló que es un tratamiento nuevo cuyo costo por ampolletas supera los dos millones de pesos y requiere de varias, pero no pierde la esperanza de poder juntarlos y llegar a dar el medicamentos su hija.

“Es inaccesible, es impagable, para una persona como yo, por eso es que estamos pidiendo el apoyo (…) cuesta más de dos millones de pesos una aplicación (…) necesitaría entre cinco y seis el primer año y ya después viendo la necesidad de que ella tenga, ahorita la urgencia es porque esa enfermedad avanza”, dijo.

Hernández Zavala contó que una de sus hijas murió hace siete años por la misma enfermedad por lo que espera en esta ocasión poder juntar el dinero para que su hija tenga el medicamento.

“Ataca todo lo que es músculos, estos bebés pacientes de esta enfermedad empiezan a perder todas sus fuerzas, ella ahorita ya no mueve sus piernas, les va afectando poco a poco incluso para comer, ahorita ella todavía come pero estoy a tiempo, por eso es la ayuda para que me ayuden a que ella tenga acceso al único medicamento que ya existe”, señaló.

Explicó que existe una organización que está intentando que el Senado apruebe que las instituciones de salud brinden el medicamento para esta enfermedad, pero Esther Abigail no tiene tiempo de esperar a que eso suceda.

Las personas que quieran ayudar pueden hacerlo en el número de cuenta 5204 1656 5019 1798.

“yo estoy segura y confío en ella que lo poco que puedan apoyarnos todo suma y que se logre algo para mi hija, que me entiendan, pueden decirme ‘es imposible que llegues’ pero yo como mamá no me puedo quedar de brazos cruzados esperando a verla morir sabiendo que hay un tratamiento”, aseguró.

AVC/Ana Alicia Osorio

También te puede interesar:

DE RAZONES Y PASIONES | Coronavirus: a falta de medicinas, las redes sociales