Naolinco de Victoria, Ver.- Moros y cristianos se enfrentaron en Naolinco de Victoria, sin embargo en esta ocasión la tradicional danza fue representada por 30 niñas y niños que se caracterizaron con el vestuario tradicional y máscaras de madera, y danzaron al compás de la música.
Los menores ensayaron tenazmente para representar a personajes como Pilatos y Sabario, tal y como lo realizan cada año los mayores a finales del mes de septiembre, costumbre que se ha transmitido de generación en generación.
La danza de moros y cristianos es una representación que la iglesia usó en la época colonial para evangelizar a la población indígena de México, y la tradición trasciende hasta nuestros días, cuando los habitantes de Naolinco y varios municipios de la región, representan la lucha del pueblo cristiano contra el musulmán.
“Es satisfactorio porque a mí me enseñaron igual desde niño, mi abuelo me inculcó el arte de la danza; tenemos que sembrar este grano de arena en los niños para que estas tradiciones nunca terminen”, señala Julio César Gómez Monterde, presidente del Comité de la Danza de Moros y Cristianos.
Recuerda que fue en el año de 1984 cuando participó por primera vez en las fiestas patronales de San Mateo, con una coreografía que le enseñó su abuelo, quien también interpretaba este personaje.
En Naolinco de Victoria es tradicional que los adultos que participan de la danza, la hayan aprendido de sus padres, y estos a su vez de sus abuelos, desde tiempos ancestrales.
“Vengan a divertirse, conozcan un rincón de Veracruz donde se pueden llenar de arte, de cultura y tradición a través de nuestra danza, gastronomía, arquitectura y están siempre cordialmente invitados a Naolinco”.
AVC
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