Desaparición de instituciones debilita combate a la delincuencia. Guardia Nacional fue creada para la seguridad no para perseguir migrantes.

El crudo diagnóstico de inseguridad del inicio de esta administración resulta optimista frente a la realidad que vivimos.

Presupuesto en seguridad y justicia, el más bajo de la última década.

Ciudad de México, 31 de enero de 2020.- La iniciativa que se propone para reformar el sistema de justicia pondría en evidencia el fracaso de la estrategia para la pacificación del país. Un estado represor no resolverá la crisis de violencia e inseguridad, sino que confirma que en México hay más balazos que abrazos, aseguró el diputado federal Héctor Yunes Landa, durante la reunión plenaria del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados.

En la víspera del inicio de periodo de sesiones ordinarias de este 1 de febrero, el legislador veracruzano presentó ante los integrantes de su bancada un recuento de la situación de seguridad y justicia que prevalece en el país a un año del inicio de la presente administración federal. “A pesar del crudo diagnóstico de inseguridad al inicio del gobierno de la 4T, este resultó optimista frente a la realidad que hoy vivimos.”

Presentó las cifras de la incidencia delictiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública: Durante el primer año de la actual administración, el más violento desde que se tienen registros, todos los indicadores de delitos de alto impacto tuvieron un incremento: homicidio (2.48% / 35 mil 588 víctimas); extorsión (29% / 8 mil 523 víctimas); trata de personas (12.6% / 644 víctimas); feminicidio (10.3% / mil 6 víctimas, la mayoría de ellas en Veracruz); y secuestro (3.4% / mil 614 víctimas).

Agregó que al menos 95 personas fueron asesinadas diariamente, cifra que representa un aumento de 2.48% con respecto al 2018. “El homicidio sigue siendo el indicador más preocupante de la seguridad pública. Tenemos una tasa 5 veces superior a la tasa mundial.  De hecho, si la Estrategia Nacional de Seguridad Pública no cumple sus objetivos de revertir esta incidencia, al final de este sexenio estaríamos contando una cantidad superior a las 200 mil muertes violentas, el equivalente a la tercera parte de toda  la población de Colima”.

Yunes Landa acusó que la desaparición de instituciones ha debilitado el combate a la delincuencia. “Sin el CISEN, el gobierno carece de información de inteligencia y planeación estratégica. Asimismo el irregular proceso de desaparición de la Policía Federal ha puesto a muchos de sus integrantes a un paso de ser absorbidos por las organizaciones del crimen organizado.”

Al mismo tiempo, criticó que el gobierno federal utilice a la Guardia Nacional para la detención y persecución de migrantes indocumentados, cuando su propósito es combatir al crimen organizado y resguardar la seguridad de la población.

En su presentación durante la sesión plenaria del PRI, señaló además la distribución de recursos públicos en materia de seguridad debe ser una expresión de coordinación y voluntad política y no un escenario para el disenso y la desconfianza. “Hoy el gobierno de la República, para responder a la peor crisis de violencia en la historia del país, ha destinado el presupuesto más bajo de la última década, debilitando a los gobiernos de los estados y los municipios, responsables de la atención de los delitos del fuero común”.

“El recorte a los programas federales de seguridad es una muestra más de que se gobierna con prejuicios y no con una estrategia definida. Este año, los estados tendrán menos recursos para programas de prevención de la violencia, profesionalización y certificación policial, así como infraestructura y equipo de apoyo necesario para la realización de sus labores”, explicó.

Al mismo tiempo, lamentó que la imagen de México en el mundo se refiere principalmente a la inseguridad. “En el extranjero ven a nuestro país como un lugar poco recomendable para invertir a causa de la creciente inseguridad y el endurecimiento de políticas económicas. Así lo dijeron en la Cumbre de Davos, donde México ha perdido prestigio y presencia; lo que ellos ven es la liberación pactada de un narcotraficante o la imagen de niños de Chilapa portando armas para integrarse a autodefensas y defenderse de la delincuencia.

Finalmente, Yunes Landa aseguró que si el gobierno federal desea recuperar la paz, se deben fortalecer las instituciones con las que ya contamos y mejorar la capacidad de sus fuerzas armadas. “Dotar de facultades extraordinarias al gobierno sólo nos acercará a un Estado policiaco”.