Cd. de México, México (Reforma).- Un juez federal aplazó para enero próximo el fallo que definirá si Javier Duarte continúa preso en el Reclusorio Norte o le concede una medida cautelar distinta a la cárcel, como son la libertad provisional o la prisión domiciliaria.
En una breve audiencia celebrada el lunes 16 en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, la defensa del ex Gobernador de Veracruz pidió el cambio de medida cautelar argumentando que la condena de 9 años de prisión ya no está firme.
Su abogado Ricardo Sánchez Reyes Retana expuso que lo anterior es así desde el pasado 5 de diciembre, cuando el Primer Tribunal Colegiado Penal ordenó tramitar la apelación contra la pena que le fue impuesta por lavado de dinero y asociación delictuosa, delitos que no ameritan la prisión preventiva oficiosa.
Sin embargo, el juez de control Juan Carlos Ramírez Benítez dijo que no había sido notificado de ese fallo y, como los tribunales ya están de vacaciones, será hasta enero cuando reciba la resolución del colegiado y convoque a una nueva audiencia para resolver la solicitud de Duarte.
“Cuando me dan intervención, manifesté que ya cambiaron de manera objetiva las condiciones legales, porque Javier Duarte ya no es sentenciado, porque con el amparo ya no lo es, esa sentencia condenatoria no ha causado estado. Como el Ministerio Público se opuso, el juez lo que acordó fue suspender la audiencia para enero, porque no ha llegado la constancia del amparo», aseveró Sánchez.
Durante la audiencia de no más de 10 minutos, el litigante dio a conocer que Duarte ya cuenta con un domicilio rentado en la Ciudad de México y presentó un recibo telefónico a su nombre, para probar su arraigo.
Esta información la proporcionó al juez previendo que, de no conseguir la libertad provisional, el ex mandatario al menos pueda aspirar a la prisión domiciliaria en tanto los tribunales determinan si su condena queda o no firme en última instancia.
«Javier Duarte no se sustrajo de la justicia, él se fue; no lo aprehendieron, él se entregó, y además se había allanado a la extradición, así que no hay un riesgo fundado de que se pueda evadir de la justicia», dijo el abogado.
«Tampoco le es atractivo irse porque si quedara firme su condena, estaría a 1 año 8 meses de quedar libre, en caso de que le concedan el beneficio de la reducción del 50 por ciento de la pena. Además, si le dan entrada a la apelación, solo podría obtener cosas buenas».
El 17 de julio de 2017 Duarte fue extraditado por Guatemala y desde entonces permanece preso en el Reclusorio Norte. El 26 de septiembre de 2018 fue sentenciado a 9 años de prisión y a una multa de 58 mil 890 pesos, en un procedimiento abreviado en el que aceptó los hechos imputados por la FGR.