En 1971, Fritz Glockner fue a Disneylandia, cual niño de clase media alta poblana; medio año después, su padre desapareció. Fue hasta el 21 de febrero de 1974, pasados dos años y tres meses, que la familia supo el motivo: “en efecto, mi pinche padre se había ido con una amante, pero no se llamaba Leticia, Guadalupe, no era Irma, era revolución, utopía, clandestinidad. Se había incorporado a uno de los 39 diversos grupos guerrilleros que actuaron en este país entre 1968 y 1979.”
De esto y más Fritz Glockner compartió en la presentación de su libro Los años heridos. La historia de la guerrilla en México 1968-1985 (Editorial Planeta), con la cual concluyeron las actividades de este año del Programa “Tendiendo puentes por la paz” de la Universidad Veracruzana (UV).
Fritz Glockner, quien se distingue como historiador y escritor de los movimientos armados en México –de manera especial de la denominada Guerra sucia–, convirtió una convencional presentación de libro en una amena y entretenida charla con estudiantes, una cátedra de historia sobre el México de las décadas sesenta, setenta y ochenta, y un testimonial de su vida.
Narró cómo su padre, Napoleón Glockner Carreto, un médico de clase media alta y propietario de un hospital en Puebla, les abandonó en julio de 1971 para integrarse a las Fuerzas de Liberación Nacional y reapareció en la cárcel de Lecumberri. De esto y más precisamente versa Los años heridos. La historia de la guerrilla en México 1968-1985.
El autor de Memoria roja. Historia de la guerrilla en México (1943-1968), Veinte de cobre o Cementerio de papel, confesó que tardó nueve años en entregar a la editorial Los años heridos, por la obsesión de lograr una historia narrativa, “una historia de fantasmas, no ficción”.
Destacó la gran diferencia que hay entre contar e inventar, y en ese caso “había que contar la historia, no caer en el panfletarismo”. Incluso, remarcó la importancia de “evitar ser torturadores del pasado”.
Con Los años heridos busca “sembrar nuevas utopías”, pues “estamos en un pinche México con una enorme pesadilla encima, con truenos y tormentas –no tengo que contarles nada después de lo que han padecido en este estado–; creo que, si no deconstruimos y reconstruimos las utopías, los sueños, vamos a valer madres”.
El evento se desarrolló el 22 de noviembre en el Aula F–17 de la Facultad de Letras Españolas de la UV y en él participaron Bryan Klett y Alfonso Colorado, quienes amén de los comentarios que prepararon para la ocasión, coincidieron en que la obra mezcla una serie de géneros, pues puede leerse como historia, novela, ensayo, antología de cuentos, reportaje, incluso como un guión de cine.
La moderación estuvo a cargo de Germán Ceballos, y entre el público estuvieron presentes Esther Hernández Palacios, coordinadora del programa en mención; Magali Velasco Vargas, directora de la Facultad de Letras Españolas, así como estudiantes y académicos.
UV/Karina de la Paz Reyes Díaz