KINÍ, Motul.— Cinco personas resultaron lesionadas, una de gravedad, al ser alcanzadas por un rayo que pegó en un árbol de ceibo, donde los afectados se resguardaban de la llovizna e ingerían cervezas.
Ayer lunes, cerca de la 1 de la tarde, un grupo de hombres decidió reunirse en el centro de la localidad tras sus labores de campo.
Eligieron reunirse a la sombra de un árbol de ceibo ubicado a un costado del muro del atrio de la iglesia de San Mateo y frente al local del comisariado; bajo él empezaron a tomar cuando de pronto un rayo cayó muy cerca de ellos.
Como una bomba
Testigos dijeron que se escuchó como una explosión fuerte, como una “bomba”, junto al ceibo y las personas que se encontraba debajo del árbol protegiéndose de la inclemencia del tiempo salieron “volando por los aires”.
Los afectados salieron aventados a poco más de cinco metros de donde se encontraban sentados.
Personas que pasaban por el lugar dieron por muertos a los cinco vecinos, pues no se movían, pero a los pocos minutos comenzaron a quejarse y a ponerse de pie para ayudarse mutuamente.
Incluso, tuvieron que reanimar a uno que perdió el conocimiento.
Otro de ellos presentó una herida cortante en la cabeza y, luego, se puso a salvo en el local del comisariado.
El rayo tomó desprevenidas a sus víctimas porque no relampagueó, sino solo se escuchó el estruendo.
La tranquilidad de la comisaría fue interrumpida por la llegada de los cuerpos de emergencia y de seguridad para atender a los lesionados y trasladarlos a los hospitales cercanos.
Peor suerte
Entre los lesionados más graves está Arcadio Canché Pool, de 54 años de edad, quien quedó policontundido y con quemaduras de primer grado; fue trasladado a la clínica del IMSS de Motul y luego al hospital Agustín O’Horán en Mérida.
Pedro Regalado Pool Pool, de 66 años, sufrió una herida cortante en la cabeza.
Con lesiones menos graves resultaron Juan Isabel Canul Pool, de 34 años; Anastasio de la Cruz Pool Dzul, de 48 años, y Ernesto Cruz Uitz, de 37.
Hasta esta comunidad llegaron elementos municipales y estatales, brigadistas de Protección Civil, así como de paramédicos de la Cruz Roja y de la Comisión Nacional de Emergencias.
Mauricio Can Tec/Diario de Yucatan