Las políticas públicas que se han implementado en los últimos 30 años sólo han servido para paliar los problemas de la cafeticultura.

Actualmente se están perdiendo las hectáreas dedicadas a la producción del café, lo que tendrá un impacto en el medio ambiente, y han surgido nuevas bacterias que afectan al aromático.

En el marco de la ponencia “La Cafeticultura Veracruzana en un nuevo escenario agroalimentario”, el especialista Esteban Escamilla Prado, consideró que si se enfrentan grandes retos

Se expuso que se deben de implementar nuevas estrategias para que la entidad siga reportando una buena producción y venta del grano a nivel nacional e internacional.

En el 2018, se logró un incremento en la producción de un 46 por ciento, sin embargo, Escamilla Prado afirmó que es importante que se apliquen nuevas políticas públicas.

“Las que se tienen desde hace 30 años, solo han buscado palear los problemas, es decir, dar una solución temporal y no permanente para los cafetaleros”, explicó el especialista quien recordó que Veracruz es el principal productor a nivel nacional.

Es ente momento se está perdiendo la producción, el primer factor que incide, es el crecimiento de la mancha urbana, y porque los cafeticultores han optado por la siembra de aguacate has, limón persa y caña, lo que genera mayor contaminación al entorno.

Por lo que planteó: “se debe de incrementar y sustentar, dales valor agregado, relevo generacional, fomentar los cafés, el incremento del consumo nacional, y otras acciones”, agregó.

Veracruz cuenta con 80 mil productores de café, por lo que de acuerdo con los especialistas es importante aplicar políticas públicas que permitan su buena producción y el cuidado de los plantíos.

AVC/ Isabel Ortega