Según fuentes al interior de la propia Secretaría de Salud, esta semana se estarían presentando las primeras denuncias en contra de la dependencia por el incumplimiento en la prestación del servicio integral de hemodiálisis para los hospitales pertenecientes  a los servicios de salud de Veracruz.

Como se recordará, el miércoles pasado dimos cuenta en este espacio de la Licitación Pública Nacional LPN-103T00000-013-19, mediante la cual la SS adjudicó el contrato a la empresa GIFYT S.A. de C.V., filial de Esterinova de Puebla, la misma que fue señalada por realizar actos de corrupción, conflicto de interés y presentar documentación falsa durante el tiempo que también prestó sus servicios al IMSS y a la propia Secretaría de Salud.

Pero en esta ocasión ese no fue el problema, sino que desde el primer día se ha incumplido con el contrato, obligando a los pacientes a que asistan a las instalaciones de la empresa y se realicen los procedimientos fuera de los hospitales, con el riesgo sanitario que ello implica.

Apenas la semana pasada, ya con la nueva empresa en operación, más de 50 pacientes de Tierra Blanca, Córdoba y Poza Rica se quedaron sin atención médica y con la incertidumbre de que sigan recibiendo su tratamiento. En Xalapa, un paciente en del hospital Nachón,  hospitalizado e inconsciente en estado crítico, no pudo atenderse por la imposibilidad de ser trasladado a la clínica de GIFYT- Esterinova, pues decidieron sacar a los pacientes y dejar al hospital sin el servicio de hemodiálisis.

En el Hospital Regional de Veracruz también se reportó desde el jueves pasado que pacientes intubados no podían abandonar la unidad para realizar el procedimiento en los laboratorios de la empresa, al mismo tiempo que las autoridades del hospital urgían al proveedor anterior a abandonar las instalaciones.

Esto sería algo razonable si no fuera porque el hospital no cuenta en este momento con el servicio. Por supuesto que hay una intensa lucha de intereses entre la empresa que se va –y lógicamente pierde un contrato millonario-, la que llega –que aun viéndose favorecida por una licitación tramposa, no ha logrado la sustitución de los equipos-, y algunos funcionarios de la propia Secretaría de Salud, más preocupados en el reparto de las utilidades que en la atención a más de 400 pacientes que están en riesgo.

De acuerdo a la misma fuente, desde el pasado primero de agosto –fecha en que GIFYT- Esterinova inició con la prestación del servicio, hay más de 100 pacientes que no han recibido la atención adecuada; ellos están en los hospitales de Poza Rica, Tierra Blanca y Río Blanco. Sin embargo, a nivel estatal serían más de 400 los pacientes afectados.

Por esta razón desde este lunes se presentaron las primeras denuncias ante las Secretarías de Salud y de la Función Pública federales, así como ante el Consejo de Salubridad General. Hasta ahora, las autoridades del gobierno estatal no se han pronunciado al respecto, ni para informar sobre el proceso de licitación del servicio de hemodiálisis, la transición entre las empresas prestadoras de servicios, ni la forma en que se está atendiendo a los pacientes que reciben tratamiento.

Es posible que no sean las denuncias sino el eventual fallecimiento de un paciente a causa de la negligencia médica lo que provoque la intervención del Gobernador. La punta del iceberg asoma rápidamente.

Adriana Aguilar, nueva dirigente estatal del PAN

Se agitan las aguas en el PAN veracruzano. En lo que fue un verdadero “bomberazo”, la Comisión Permanente del Consejo Nacional del PAN designó a la queretana Adriana Aguilar Ramírez como nueva Presidenta del Comité Directivo Estatal, encargada de convocar a nuevas elecciones, tras la anulación dictada por el Tribunal Electoral del Estado.

Y digo bomberazo porque hasta el mes pasado, la joven Secretaria Nacional de Promoción Política de la Mujer estaba ocupada en realizar la campaña #LevantaLaMano, a fin de que las presidencias y secretarías de los Comités Directivos Estatales y Municipales del Partido Acción Nacional sean integrados de manera igualitaria.

De hecho, la propia Aguilar Ramírez había informado que en las próximas semanas se llevaría a cabo una convocatoria nacional para que representantes de todos los estados trabajen en la elaboración de propuestas para una reforma de estatutos con perspectiva de género, la cual presentarán ante la Comisión de Reforma de Estatutos del PAN.

Ya no será así, al menos por el momento. Su tarea es controlar a las tribus azules que pelean la dirigencia estatal.

Las del estribo…

  1. El Presidente López Obrador deshoja la margarita: utiliza los datos del Coneval para fustigar la pobreza generada en la última década –aunque esto signifique legitimar el trabajo de la institución–, o lo deja pasar y utiliza sus propios datos –seguramente más alarmantes– para endosar la culpa de la pobreza a los “conservadores neoliberalistas”. Para los dos tiene.
  2. Huatusco y Actopan, antaño dos municipios de mucha tranquilidad, han agitado las aguas de la política estatal a partir de dos homicidios. En ambos casos, los legisladores locales hablan no sólo de llamar a cuentas sino de “tomar decisiones” drásticas, por lo que podrían seguir la suerte de Mixtla, aunque de nada servirá remover a todos los alcaldes si la violencia no cesa.