Con una inversión de más 600 millones de pesos y una visión futurista, la Universidad Panamericana (UP) quiere ponerse a la vanguardia como “centro de conocimiento, de investigación y constituirse como una universidad referente en América Latina, con el propósito de construir mecanismos de mayor impacto social e influencia en la cultura del país”.

La UP y el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE) anunciaron recientemente la construcción de un nuevo campus universitario en Bosque Real, municipio de Huixquilucan, en el Estado de México, con una extensión total de 40 hectáreas, que será dedicado a la investigación, al desarrollo de tecnología y a la atención sanitaria: Ciudad UP.

El proyecto arquitectónico máster estuvo a cargo de Sasaki, un despacho de arquitectos de Boston. La edificación tendrá certificación LEED Platinum, que es la más alta en materia de sustentabilidad, lo que quiere decir que se abastecerá de su propio pozo de agua, no emitirá descargas al drenaje y reducirá al mínimo la huella de carbono. El complejo educativo comenzará a construirse en la segunda mitad de este 2019.

En exclusiva, el rector general de la universidad, José Antonio Lozano Díez, detalló a El Economista que el futuro de Ciudad UP está pensado a 50 años. Lo había dicho en este mismo espacio a fines del año pasado, cuando nos dio la primicia del proyecto, hoy lo reitera: “En Ciudad UP sabemos qué queremos lograr en los siguientes 50 años, qué carreras vamos a tener y qué líneas de investigación vamos a impulsar. Tenemos concebido el proyecto a largo plazo.

“Es un campus dedicado a la formación integral de los alumnos y a la investigación”, dijo el doctor Lozano. Está pensado teniendo como referencia el modelo estadounidense, con instalaciones para alojar a los estudiantes. “En la medida en que los alumnos pasan más tiempo en la universidad podremos brindarles más herramientas de formación.

“Estudios en Stanford indican que más de 70% de que lo aprende un alumno en la universidad lo aprende fuera del aula, en actividades extracurriculares y con el intercambio entre colegas y profesores”, expuso el rector.

El complejo es un proyecto a 20 años, en la primera etapa se prevé contar con una capacidad para recibir a 1,800 alumnos de licenciatura y en su etapa final tendrá espacio para albergar hasta 10,000; sin embargo, precisó que no llegarán a ese número y sólo aspiran a 8,000 estudiantes, pues el modelo de la UP es personalizado; además, al concluir el proyecto, contarán con un hospital-escuela y un centro de investigación en las áreas de biomédica, de tecnología automotriz y tecnologías de la información.

El Economista