El pasado 24 de abril, la población del municipio veracruzano de Mixtla de Altamirano se consternó por el asesinato de la presidenta municipal, Maricela Vallejo.

La edil era acompañada por su esposo y una persona más; los tres fueron acribillados cuando circulaban por el tramo carretero Zongolica-Orizaba, a la altura del municipio de Los Reyes.

Se trató de un hecho que adquirió relevancia en el contexto nacional y que generó un nuevo episodio en el desencuentro entre el Poder Ejecutivo de Veracruz y la Fiscalía General del Estado.

Mixtla de Altamirano registra números alarmantes en cuanto a la marginación; en el Informe anual sobre la situación de pobreza y rezago social 2017, que elabora la Subsecretaría de Planeación, Evaluación y Desarrollo Regional de la Sedesol, se consignan datos que exigen la intervención gubernamental y que ponen al descubierto el fracaso de las políticas instrumentadas para atender el problema.

La Sedesol indica que el grado de rezago social de este municipio es muy alto y que se trata de una zona de atención prioritaria rural.

En Mixtla de Altamirano, el analfabetismo se ubica en 71.4 por ciento; en tanto que 93 de cada 100 personas mayores de 15 años no tienen la primaria terminada; 92 por ciento vive en casas con pisos de tierra; y 21 por ciento carece de sanitario; 80 de cada 100 no cuentan con agua entubada; y 93.4 tampoco tiene drenaje sanitario.

Ocho de cada diez personas que habitan en este lugar enfrentan condiciones de pobreza extrema.

Imagine usted: en Mixtla no hay una sola casa con lavadora y probablemente sólo exista uno o dos refrigeradores en todo el municipio, dado que esa carencia se registra en 99.47 por ciento de los hogares.

El Coneval maneja que más de 3 mil 600 habitantes de Mixtla registran carencia por acceso a la alimentación.

En este municipio, además de los recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal, han aplicado recursos la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas; Sedesol; Semarnat; Sedatu; Conagua; y SEP. Sin embargo, la población sigue igual de pobre.

El pasado jueves, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo dio a conocer el Índice de Desarrollo Humano Municipal. Mixtla de Altamirano volvió a ser noticia, dado los alarmantes niveles de precariedad de su población.

El Índice de Desarrollo Humano toma en cuenta variables como el acceso de la población a los servicios de salud, el ingreso de las personas y la educatición, entre otros.

El resultado de ese estudio de la ONU indica que Mixtla de Altamirano es el noveno municipio del país con el peor nivel de desarrollo. En esa lista se encuentran cuatro municipios de Oaxaca; dos de Chiapas; uno de Jalisco y otro de Chihuahua.

La dimensión de la pobreza en Mixtla es similar, de acuerdo con la fuente, a la que se registra en el país africano de Yimuti, donde ante las carencias de agua, alimentos y servicios sanitarios ha sido necesaria la ayuda humanitaria del exterior.

Ese país africano, por cierto, registra una mortandad en menores de 5 años de 54 por ciento. Uno de cada diez niños muere antes de cumplir un año. Ahí, la mitad de la población vive con menos de un dólar al día.

De ese tamaño es la dimensión de la pobreza en Mixtla, donde los problemas sociales gubernamentales de las últimas dos décadas han contribuido muy poco, casi nada, a la solución del enorme rezago.

@luisromero85