“¡Cuitláhuac no está solo!”
López Obrador
Nos preguntan ¿por qué insiste tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador en recomendar a Cuitláhuac García Jiménez como una persona honesta, como un buen gobernante, si se supone que debe serlo?
En esta séptima gira como presidente de México, a López Obrador no le podía faltar durante sus discursos el reconocimiento y palabras de apoyo al mandatario veracruzano, lo que provoca que aumente la suspicacia de los veracruzanos en torno a este tema: ¿tendrá información el Presidente de la lucha intestina que libran colaboradores cercanos al gobernante, que no son los que él puso, en su contra para debilitarlo y acortar su periodo Constitucional al frente del gobierno a solo dos años; le preocupará al Presidente que las cosas en Veracruz estén saliendo tan mal que piense que todo se debe a la falta de apoyo de sus enviados para apuntalar a Cuitláhuac García; será que tiene en su poder encuestas de opinión que ponen muy en mal al gobernante, por la decepción que van externando cada vez con mayor insistencia los veracruzanos de un gobierno que no demuestra oficio político, que abusó del poder para incurrir en nepotismo, que ha engañado al pueblo habilitando como funcionarios a connotados fidelistas, duartistas y yunistas?
Es imposible dar una opinión cercana a lo objetivo; lo único que podemos decir es que de acuerdo a lo que hemos visto de AMLO con el Gobernador, es que haga lo que haga Cuitláhuac, él seguirá al frente de los destinos del estado con el apoyo verbal del Presidente, sí, porque en lo material o económico no se ha visto ningún apoyo, y Veracruz seguirá siendo un bastión electoral importante del morenismo, por decreto presidencial, hasta que venga una elección y en las urnas se refleje la realidad.
Un cebollazo como el que AMLO le da a Cuitláhuac cada que viene a Veracruz, que es muy seguido, en gobiernos anteriores, se reflejaba en un caudal de beneficios para los veracruzanos. Apoyos económicos para obra pública, para la construcción de grandes obras, para poner en marcha programas de beneficio en cada una de las ramas de la producción en el campo, para poder aumentar los salarios de los trabajadores y en fin, en muchas cosas materiales que el Presidente acompañaba al reconocimiento público hacia el mandatario, como cuando Carlos Salinas de Gortari, en la inauguración de la autopista a Córdoba dijo que Dante Delgado era el mejor intérprete del programa “Solidaridad”, el programa estelar de Salinas, y le siguió una cascada de apoyos para transformar literalmente a Veracruz.
Hoy no hay nada de eso, el cebollazo y ya, como para decir a los interesados en el asunto: pase lo que pase en Veracruz, Cuitláhuac seguirá siendo Gobernador, eso cuando menos debería dar certidumbre y apaciguar los ánimos sucesorios de los adversarios del gobernante.
Desde Perote los priistas
Ha provocado infinidad de suspicacias la comida de Perote del pasado viernes, en la que estuvieron José Antonio Meade, José Yunes Zorrilla, el dirigente estatal de Antorcha Campesina, Samuel Aguirre Ochoa; el dirigente del PVEM en Veracruz, Marcelo Ruiz Sánchez; el hijo de Fidel Herrera, Javier Herrera Borunda, el exalcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez; el legendario político sureño Carlos Brito Gómez, y Marilda Elisa Aguirre Rodríguez, sin duda la priista más carismática (bonita), inteligente y que a la hora de unir voluntades sabe hacerlo sin haber pertenecido a la cuadra de las “reinis”.
Una de las suspicacias es que este grupo de distinguidos priistas veracruzanos, o lo que queda de ese partido, que conservan autoridad moral, no invitó a ninguno de los nuevos integrantes del CDE del PRI de Yunes el del estero, que capitanea Marlon Ramírez, todos ellos carentes de autoridad moral, lo que quiere decir que los priistas-panistas están en un lado y los priistas químicamente puros en otro muy distante. Pero qué hacía en esa comilona de Perote el dirigente estatal del PVEM, Marcelo Ruiz y el hijo de Fidel si se supone son parte del morenismo.
Lo canijo en este tragantín priista fue la presencia del dirigente estatal de Antorcha Campesina, Samuel Aguirre Ochoa, quien desde ese lugar que está en alto, disfrutaba de las acciones de sus agremiados persiguiendo a Andrés Manuel López Obrador por Coatepec, para abuchearlo, gritarle sus verdades, echarle a perder su evento y demostrarle que con “Antorcha Mundial” como le dice AMLO a esa organización, se van a topar con pared. Claro, desde Perote se ven mejor los toros, allá los chairos que se ganen sus terrenitos.
Un gobierno sin poderes el de AMLO
Por lo que hemos visto Andrés Manuel López Obrador, en su llamada Cuarta Transformación, ha incluido la desaparición de los llamados poderes fácticos.
La Iglesia católica es uno de ellos, muy respetable hasta antes de AMLO, pero con el mensaje que les mandó de dar manga ancha a los fieles de la llamada “Luz del Mundo”, a quienes prestó ni más ni menos que el Palacio de Bellas Artes para festejar el cincuenta aniversario del nacimiento de su líder, el mensaje que mandó AMLO es de no tomar en cuenta a la Iglesia católica como representante única de la fe de los mexicanos.
Otro poder que ha desaparecido, o al menos eso intenta, es el que representaban las fuerzas armadas, el Ejército Mexicano. Primero se los quitó al desaparecer lo que era el Estado Mayor Presidencial, un aparato que mantenía al titular del Ejecutivo secuestrado, sin poder hacer nada que no pasara por el tamiz de los altos mandos del Ejército, hoy, además de habérselos sacudido, ha mandado a la tropa a enfrentarse con el pueblo, con las llamadas autodefensas, ordenando no contestar a las agresiones con lo que han hecho el ridículo a través de videos donde se ve a nuestros soldados siendo víctimas de agresiones de parte de ciudadanos, sin meter las manos porque así lo ordenó el Presidente, comandante supremo. ¿Quién le tiene respeto después de eso a los miembros de lo que fue nuestro glorioso Ejército Mexicano?
Con los empresarios, AMLO libra una batalla que se encamina a través de la Fiscalía General de la República. Primero les canceló la construcción del aeropuerto de Texcoco, donde los dueños del billete en este país, y miembros de otro de los poderes fácticos, tenía sus inversiones; luego los comenzó a poner en evidencia (ridículo) con denuncias mediáticas que no trascendieron más allá de la desaparición de la fuerza que tenían frente a los ciudadanos, y ahora con el asunto de Lozoya, AMLO se apresta a entambar a dos que tres peces gordos, empresarios, que fueron muy poderosos en sexenios anteriores.
Y otro poder que combate AMLO con toda la perversidad de que está diseñado, es el de la prensa. López Obrador considera que todos los periodistas son sus enemigos porque tuvieron trato con los anteriores gobiernos. Primero les cortó la publicidad que es de lo que todos los medios se sostienen, luego destruyó, o trata de hacerlo, a los columnistas y comentaristas de mayor peso, filtrando una lista de columnistas “beneficiarios” de los gobiernos anteriores, con las cantidades millonarias que se supone recibieron de los gobiernos priistas y panistas, y ahora se confronta con el diario Reforma, el único independiente, filtrando la participación de la hija del director en una secta de explotación sexual que opera en los Estados Unidos.
¿En eso consiste la cuarta transformación?… Un gobierno sin equilibrios no puede decirse democrático.
Senadores piden seguridad
Nos enteramos con asombro e indignación que la senadora Citlalli Hernández Mora, del partido Morena, habría sido víctima de un atentado. De acuerdo con la versión revelada por el propio equipo de la Senadora, el acto se perpetró con un artefacto explosivo en forma de libro. Afortunadamente el incidente culminó su macabro ataque dejando únicamente quemaduras leves en la funcionaria.
Como consecuencia de lo anterior y a petición expresa de la Mesa Directiva del Senado de la República, la Secretaria de Gobernación ha determinado la asignación de personal de seguridad para cuatro Senadores de distintos partidos, quienes solicitaron protección por distintas razones, siendo estos: Nestora Salgado, militante de Morena, quien es Senadora por Guerrero; Mauricio Kuri, militante del PAN, Senador por Querétaro; Ángel García Yáñez, del PRI, Senador por Morelos, y Alejandra León Gastélum, de Morena, Senadora por Baja California.
Reflexión
La inercia del arrastre del llamado Movimiento de Regeneración Nacional sigue en el ánimo de los mexicanos, en algunos lugares con menor intensidad pero en Puebla y Baja California, Morena se levanta con un triunfo arrollador, al estilo de “Me canso ganso”. Escríbanos a mrossete@nullyahoo.com.mx formatosiete@nullgmail.com www.formato7.com/columnistas