El youtuber en cuestión es el creador del canal ReSet, quien tuvo la brillante idea de grabar esta supuesta broma. En el video se mostraba a ReSet comprando un paquete de galletas Oreo para regalarlos a un indigente.
Pero en lugar de ser galletas normales, estas fueron rellenadas con pasta de dientes por el youtuber. Después de eso, se grabó a sí mismo regalando las galletas, además de grabar la reacción del vagabundo.
Gracias a este acto, se le condenó a 15 meses de prisión, pagar €20,000 euros al afectado y a no regresar a la plataforma de YouTube por 5 años. Además de tener que borrar su canal durante ese periodo de tiempo. Sin poder crear otro o ganar dinero de sus anteriores videos.
Hablando de dinero, este youtuber ganó alrededor de €2,000 euros gracias al video en el que hacía la broma al indigente. Además, grabó dos videos posteriores, uno en donde le daba más dinero al mismo hombre y el posterior video de disculpas. Todos monetizados sin falta.
Curiosamente, ya que ReSet no presentaba antecedentes penales, no cumplirá los 15 meses en prisión. Sin embargo, lo mejor que ha salido de todo esto es la indemnización que se le tiene que pagar al indigente. Ya que este enfermó después de comer las galletas que ReSet le dio para humillarlo públicamente.