Tener la capacidad de elaborar teorías implica dejarse llevar por la intuición porque en ese momento comienza a hacerse ciencia, expresó Jorge Lionel Galindo Monteagudo, académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en el 42 aniversario de la Facultad de Sociología de la Universidad Veracruzana (UV).
El docente impartió la conferencia magistral “Teoría sociológica contemporánea: algunas reflexiones sobre objeto, cuerpo y comunicación”, en el Auditorio “Jesús Morales Fernández” de la Unidad de Humanidades.
Es importante que se reflexione sobre cómo podemos enseñar o aprender a teorizar, comentó el ponente, porque una cosa es aprender estadística pero es difícil aprender a teorizar.
En la propuesta del filósofo Charles Sanders Peirce, teorizar tiene que ver con algo que nos genera sorpresa cuando adquirimos información de un fenómeno.
“Esto nos lleva a veces a tratar de adivinar por qué las cosas son de una manera determinada y no de otra; justamente lo importante del proceso de teorizar implica dejarse llevar, confiar en las intuiciones y seguirlas. Pero ahí no se detiene la ciencia, ahí empieza la ciencia.”
Galindo Monteagudo subrayó que esto no es un asunto menor porque se relaciona directamente con el contexto de América Latina, inclusive muchas veces se dice que en México y Latinoamérica no se hace teoría, “pero esto es absolutamente falso pues no habría sociología porque toda sociología implica teoría”.
Aclaró que este tipo de declaraciones remiten a que no se hace cierto tipo de sociología, que ni en México ni en América Latina se hacen teorías generales, de grandes cosmovisiones como las que elaboraron autores europeos como Pierre Bourdieu y Michel Foucault.
Uno de los grandes aportes de la región latinoamericana a este tipo de teorías es la teoría de la dependencia, pero es uno de los escasos ejemplos que existen, apuntó el ponente.
“¿Qué tiene que ver esto con dejarse llevar e imaginar? Es una invitación para romper con esta idea de jerarquías que tenemos de concebir la palabra de Jürgen Habermas como si fuera palabra de dios, palabra de ley. Sí son muy importantes, pero nosotros podemos desarrollar nuevas teorías, podemos retar, generar nuevas interpretaciones”, dijo a los universitarios.
Para lograr estas capacidades tenemos que imaginar y eso no es tan sencillo, aunque lo pareciera; “imaginar teorías no es sencillo porque tenemos muchas cosas que nos detienen y pensamos que no nos podemos atrever”.
El investigador reconoció que el papel del teórico en la sociología contemporánea es difícil de definir por la cantidad de cambios que ha enfrentado el mundo y la propia sociología, lo que dificulta a su vez la posibilidad de hacer teoría como antes.
Hace años, cuando alguien se presentaba como teórico se consideraba como un investigador en el terreno de lo abstracto y elevado; ahora si no se hace investigación empírica, su autoridad es cuestionada, observó.
De acuerdo con el sociólogo norteamericano Omar Lizardo, el campo de la teoría ha sufrido modificaciones que hay que tomar en cuenta y son, por ejemplo, la desinstitucionalización de la enseñanza de la sociología.
“Esto tiene una relación directa con la devaluación del trabajo teórico porque hoy en día es difícil que una plaza académica solicite a un especialista en teoría; hoy se buscan especialistas en movimientos sociales, en sociología de la violencia, no se busca a un teórico”, continuó Galindo Monteagudo.
Lizardo agregó que al día de hoy se acumulan múltiples modos de hacer sociología sin un principio estructural claro para organizarlos, a lo que se suma “un agotamiento de la tradición europea”.