El Centro Penitenciario de Pacho Viejo recibió la visita del fundador de la organización “Prison Yoga Project” (Proyecto de Yoga en Prisiones), James Fox, para compartir sus conocimientos con las personas privadas de su libertad, con el objetivo de contribuir a la mejora en materia de reinserción social.
Gracias a la gestión de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), a través de la Dirección General de Prevención y Reinserción Social (DGPRS), el también autor del libro “Yoga: un camino para la curación y la recuperación”, visitó por primera vez un centro penitenciario estatal en el país, donde explicó el punto de partida para impartir yoga en prisiones.
James Fox reveló a los internos que la mayoría de las personas privadas de libertad habían experimentado –fuera de prisión– situaciones de abandono, violencia doméstica, abuso sexual, discriminación, marginalidad social, consumo excesivo de sustancias, entre otras situaciones adversas.
A través de las prácticas dirigidas desde su organización, James Fox ha inspirado el establecimiento de programas de yoga en centros penitenciarios en países como Estados Unidos, México, Holanda, Canadá, India, Noruega, Suecia, el Reino Unido y los Países Bajos.
Este evento contó con la presencia de la subsecretaria de Prevención y Participación Ciudadana, Saraí Peña Galaviz; el fotógrafo con reconocimiento internacional, Robert Sturman; la directora del Proyecto Yoga en Prisiones México, Luisa Pérez Escobedo; el ciudadano Joel Acosta Lizárraga, expersona privada de libertad, así como autoridades del centro penitenciario de Pacho Viejo.