Las expresiones de la modernidad pretendida comodemocracia e igualdad, dista mucho de llevarse a cabo en este
país. Ante la ley, la libertad es un estado de desplazamiento corpóreo hacia donde el individuo pretenda o quiera hacerlo, sin límite o obstáculo que le cerque el deseo de descentramiento. Los límites de la democracia, arriesgan la importancia crucial de una libertad más allá de una libertad física, ya que, lo que se debe de pretender, es allegarse de una libertad mental, porque limitar el libre albedrío, conduce al incarceramiento del pensamiento de una sociedad.

Es notable, que el poder político o el poder de las religiones (entiéndase como un poder de dominio) dirigen el
comportamiento de la conducta social. Los formatos conductuales establecidos en una sociedad, determinan su presente-futuro, arraigado en su pasado, que impide o ralentiza la evolución hacia otros estadios. La verdadera personalidad de las sociedades se construye de quienes les dirigen, les han rodeado o les rodean, porque la capacidad comunicativa desarrollada en sus contenidos, es la misma del entorno o ambiente en que se desenvuelven o se presentan. Esto se confirma en los discursos en política y religión, en donde un porcentaje menor se atreve a romper las barreras del pensamiento que sostienen las cadenas del costumbrismo.

Baruch Benedictus Spinoza lo refirió como la “obediencia exterior”, el sentido de culpa político-social-religioso, que somete y reprime “la actividad espiritual interna”, en donde las democracias se arriesgan a debilitarse y las religiones pierden el sentido de la espiritualidad. Estas largas experiencias sociales, han provocado cortocircuitos en el arduo trayecto de la historia entre las creencias y la razón, utilizando un pasado que empuja en continuum chantaje moral, con intensos mecanismos condicionantes que impiden al ser humano desarrollarse evolutivamente. Un narcisismo de la politiquería y la religiosidad. Estas ficciones conductuales alienadas, subordinan los pensamientos de las sociedades, constituyendo un factor determinante de la corrupción, que surge tras toda una
permanencia de la adquisición del poder trascendiendo de un régimen a otro, impidiendo la verdadera evolución.

En 1520, Martín Lutero quema la bula Exsurge Domine, expedida por León X, Papa 217 de la Iglesia Católica, donde se le notifica su excomunión. Con este gesto, manifiesta su oposición, que había permanecido inquietante hacia el interior de la Iglesia Católica. A partir de esta manifestación,se torna en protesta fuera de la Iglesia, lo que induce y convierte su pensamiento en un movimiento evolutivo del catolicismo. Esta sacudida de protesta se convierte en la Reforma que se transforma en el protestantismo. Ruptura que construye organizaciones e instituciones con poderes, con expansión de vitalidad del movimiento evangélico, contrastando con las dificultades de los formatos del establishment católico conservador. El control y dominio de las mentes humanas ha sido la constante de los grupos de poder religioso-político-económico ante el sometimiento de los pensamientos que definen las conductas sociales.

George Orwell, en su satírica novela Rebelión en la granja, – 1945- da cuenta de los procesos de corrupción, de cómo un régimen corrompe a otro; en donde un grupo de animales de una granja expulsa a los humanos tiranos, creando un sistema de gobierno propio que acaba convirtiéndose en otra tiranía brutal.

El narcisismo de la democracia, la religión y el dominio del control económico, configuran la creación y la atención de las necesidades del pensamiento humano. Una Iglesia Católica protestante, ante lo que sus dirigentes consideran un bajo perfil de las actividades gubernamentales, una Iglesia que retoma el protestantismo a la manera de Martín Lutero, nada más que no se mira hacia dentro, observa la paja en el ojo ajeno. Una Iglesia Católica que va extraviando adeptos, e intenta hacer lo que sea para mantenerse. Unos representantes de la Iglesia Católica que también tienen sus intereses como terrenales que son, una Iglesia que busca afanosamente la redención, ante el castigo que los mismos fieles le han impuesto, formando membresía en otras religiones que enaltecen y favorecen la fe de los necesitados de atención espiritual, una Iglesia Católica que señala hacia fuera y no se mira hacia dentro, que poco construye para mantenerse, aludiendo a los “pecadores” que administran la gobernanza.

En los años del pasado reciente, los prelados sugerían a los gobernantes en corto, en cortito, con sutileza, con prudencia, casi en silencio, con mesura, tejiendo fino y delgado, con la secrecía casi casi de la confesión. Entonces los gobernantes se santiguaban para recibir las bendiciones del creador, y ambos, sacerdotes y gobernantes se socorrían por el bien del pueblo y de la estabilidad social. Amén.

Sintácticas

Ernesto Cardenal, sacerdote, teólogo de la liberación, poeta, escritor, escultor, traductor y político nicaragüense, que le han merecido varios premios y el reconocimiento internacional; quien fuera humillado en 1983 por Juan Pablo II prohibiéndole administrar los sacramentos, tres décadas después, el papa Francisco ha levantado la suspensión a divinis. De acuerdo a información Internacional de El País (17- II-19), el obispo auxiliar de la arquidiócesis de Managua, Silvio José Báez, se acercó la semana anterior, al hospital donde se encuentra el poeta, se postró ante su cama y le dijo: “Le pido su bendición como sacerdote de las Iglesia católica”.

Murciélagogenosis:
Capacidad auditiva entre la burocracia para captar lo que se dice en voz baja.

 

Margaret Windler. Soprano. Ave María. Franz Schubert: