La esquizofrenia se define normalmente como una alteración de sustancias químicas y estructurales en células del cerebro y que provocaría problemas mentales graves y trastornos del habla o del comportamiento.
Hasta ahora todos sus tratamientos se asociaban con el cerebro y cómo ahí se buscaban algunas respuestas.
Sin embargo, un reciente estudio de un equipo internacional de científicos anunciado en la revista Science Advances da cuenta de que hay otro lugar dónde se podrían buscar respuestas.
Las tripas y la esquizofrenia
Según estos estudios, en los intestinos podría estar la respuesta a posibles curas para esta enfermedad.
Hay un ecosistema de bacterias y microbios que viven en nuestros tractos digestivos, conocido como el microbioma intestinal y ahí podrían existir respuestas.
En esta investigación se relacionó a los microbios intestinales faltantes con la depresión y trastornos gastrointestinales marcados por insectos intestinales atípicos.
El doctor Ma-Ling Wong, médico genetista de la Universidad Estatal de Nueva York secuenció el material genético en muestras de heces de pacientes con esquizofrenia, así como a individuos sanos reclutados en el Primer Hospital Afiliado de la Universidad de Medicina de Chongqing en China.
Cómo detalle el mismo estudio:
Encontraron que los pacientes con esquizofrenia tenían microbiomas intestinales menos diversos que los pacientes sin esquizofrenia. Los microbiomas de pacientes esquizofrénicos también albergan tipos únicos de bacterias.
Lo más espectacular del proceso investigativo se dio cuando transplantaron estos gérmenes fecales infectados de los pacientes con esquizofrenia a ratones libres de gérmenes .
Descubrieron que «los ratones se comportaron de una manera que recuerda el comportamiento de las personas con esquizofrenia», dijo Julio Licinio, quien co-dirigió el nuevo trabajo con Wong.
El doctor Licinio agregó sobre esto que:
“Ningún tratamiento que damos hoy se basa en un cambio de los microbios en el intestino. Entonces, si pudieras demostrar que cambiaría el comportamiento de una manera positiva, tendríamos una nueva forma de abordar la esquizofrenia «.
Con información de FayerWayer