Las 14 hectáreas del área natural protegida del Tejar–Garnica se convirtieron en refugio de malhechores y en “tierra de nadie” porque es ahí donde los vecinos de la colonia Álvaro Obregón han padecido que les dejen cadáveres desmembrados, por lo que pidieron al gobierno del estado, al Instituto Nacional de Arte e Historia (INAH) y al ayuntamiento local el rescate de este espacio.
En la reunión de la Asociación Civil (AC), Semillero Empresarial para el Desarrollo de México, el presidente del Colegio de Arquitectos, José Cándano Montemayor expuso que desde el 19 de abril del 2018, fue cerrada el área Tejar Garnica por la Secretaría del Medio Ambiente estatal (Sedema) y desde entonces no se ha puesto remedio.
Esta ANP se ubica al norte con el panteón Palo Verde; al sur con el fraccionamiento El Tejar; al oriente con el bulevar Murillo Vidal; y al Poniente con la colonia Álvaro Obregón.
“Primero nos fueron a dejar ocho cadáveres desmembrados dentro de una camioneta y posteriormente entraron por dos muchachos que habían secuestrado la semana anterior en el Fasti de 20 de noviembre, en el que estaba entre ellos el conserje de la colonia Álvaro Obregón y los fusilaron junto a las bardas del Tejar”.
En esta área protegida, en cuatro de sus hectáreas se han encontrado vestigios prehispánicos según lo ha catalogado el INAH, dijo el presidente del Colegio de Arquitectos.
Detalló que a consecuencia de los hechos de inseguridad, los vecinos del fraccionamiento El Tejar junto con los grupos de vecinos de la colonia Álvaro Obregón “nos vimos obligados a cerrar el parque mientras que la secretaría del Medio Ambiente no pudiera dar la seguridad que se necesitaba para todos nosotros”.
En una ocasión, la secretaría de Seguridad Pública (SSP) organizó una “Razia” en el parque cuando todavía estaba al cuidado de los vecinos, porque había gente que se drogaba y utilizaba los cafetales del área como madrigueras, informó.
“Habían llevado colchones, lonas y ahí planeaban sus asaltos e incidencias delictivas y ahí mandaron un comando con motocicletas, con camionetas de tres toneladas, el comandante tuvo a bien hacer un cercado del área, de irla cerrando cual sería la sorpresa que encontraron a 15 con cuchillos, navajas, pistolas y a partir de ahí se tuvo que intervenir” dijo el arquitecto.
Ante estas circunstancias, los vecinos se vieron en la necesidad de cerrar el área, pero ahora hay cuatro equipos de la colonia Álvaro Obregón interesados en preservar el lugar.
“Pero la secretaría del Medio Ambiente no había querido participar sino que había sido un obstáculo que obligó a que cerrara el parque y a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se puede intervenir en las zonas arqueológicas, existen cuatro hectáreas con vestigios arqueológicos en el 2013 vimos las configuraciones de que ahí existen” finalizó.
Verónica Huerta/Avc