De los siete mil alumnos y alumnas que asisten al Instituto Tecnológico de Xalapa (ITS) se hará una estadística de cuántos y cuales estudiantes provienen de familias de escasos recursos económicos, cuáles son padres o madres solteras o tienen riesgos de abandonar la carrera, para que el cuerpo académico les apoye en continuar su preparación y evitar la deserción, afirmó el director, Walter Luis Saiz González.
“Se trata de decirle al jefe de carrera, hay esta dificultad con el muchacho o muchacha que necesita ahorita tu apoyo, porque en la forma que ha estudiado ha salido mal. Vamos a tener reunión con los muchachos y decirle a ver concéntrate en esta materia y vamos a sacra la carrera y vamos a disminuir los índices de deserción” dijo el director.
Saiz González explicó que una niña o niño criado en zonas rurales, no tiene la misma calidad educativa que los habitantes de una ciudad, que asisten a escuelas con biblioteca propia, que en su casa el papá o la mamá cuentan con una computadora, una impresora y tienen acceso a otros estudios, deportes y actividades culturales.
“Los nacidos en familias de escasos recursos no tienen las mismas posibilidades y son el 60 por ciento de los estudiantes o más que hay en Veracruz, por ejemplo el joven carece de tener un librero, un escritorio propio, por su misma situación socioeconómica de la familia, agarra la mesa de comer, no compra libros de texto, no porque no quiera” explicó.
Las familias en las zonas rurales están ocupadas por obtener recursos para cubrir las necesidades básicas de todo ser humano como: Alimentación, vestido y servicio médico, por lo tanto el comprarle un libro de más a un hijo o hija, representaría un gasto que es difícil de cubrir-
Dijo que los jóvenes de zonas marginadas, llegan a la ciudad con ganas de estudiar y obtener el título de una ingeniería o licenciatura, sin embargo, al no haber cursado antes un sistema escolarizado, con horarios establecidos, estudiar de tiempo completo y exigencias de maestros y maestras, el estudiante “Se desorienta”.
“Aquí en el Tecnológico tenemos jóvenes que estudian, trabajan y tienen familia, aquí hay jóvenes que son padres o madres solteras sin pareja, atienden a sus hijos, asisten con los hijos en brazos. En exámenes le piden a los compañeros: Oye cuídamelo en lo que yo presento examen. Imagínense con esos distractores, ¿Qué capacidad de concentración va a tener?” explico.
Al finalizar dijo que el Instituto obtendrá la estadística de cuáles y cuántos son los alumnos y alumnas con probabilidades de abandonar la carrera, porque no han tenido la capacidad económica para de salir adelante, a fin de darles un examen de oportunidad.
Verónica Huerta/Avc