La falta de conciencia, principios y valores, así como la ignorancia es lo que motivan actos de corrupción, opinó el Auditor General del Estado, Lorenzo Antonio Portilla Vázquez.
“Los frenos que pueden impedir que una persona realice actos corruptos son… los principios y valores con que cuente. Dichos principios y valores generan conciencia. La conciencia hace que el individuo asuma una responsabilidad y, en consecuencia, posea un tipo de comportamiento. Un adecuado comportamiento se asocia a una sana educación”, expuso en su mensaje al clausurar el Taller de Autoevaluación IntoSaint.
Mencionó que cuando no hay educación, ni principios ni valores en la mente de la persona, se da paso a la ignorancia. La ignorancia es caldo de cultivo para los antivalores y las prácticas corruptas.
“El reino de la ignorancia es campo fértil para las más descabelladas ideas y los más perversos actos del ser humano. La ética saca de esa ignorancia, por eso es clave para debilitar la corrupción”, citó.
Al referirse al trabajo del Orfis, recordó que su función está debidamente sustentado y motivado en la normatividad vigente; en primera instancia somos preventivos, porque sabemos que prevenir, es avisar en tiempo y forma lo que deben de hacer y cómo deben de hacerlo; en segunda instancia, somos correctivos, y aquel que no haya escuchado o atendido nuestras actividades preventivas, sabe que tendrá consecuencias y deberá atenerse a ellas.
“Que los recursos públicos que auditamos, se administren con eficiencia, eficacia, economía, transparencia y honradez para satisfacer los objetivos a los que estén destinados”, concluyó.
Isabel Ortega/Avc