¿Y la nueva corriente del PRI será alterna o directa?
–Chopenjawer
Hace dos años quizás era impensable que Cuitláhuac García Jiménez se convirtiera en gobernador de Veracruz. Quien ya tenía rato promocionándose (y anhelando) la soñada gubernatura era el inquieto Miguel Ángel Yunes Linares, hijo pródigo de Soledad de Doblado.
Yunes en reiteradas ocasiones intentó ser el candidato a gobernador. En este caso, se parece mucho a López Obrador con su sueño para alcanzar la Presidencia de la República: tenía ya rato haciendo campaña. Va la secuencia…
Primero, desde los tiempos de Chirinos como gobernador (1992-1998), siendo Yunes el secretario general de Gobierno y luego presidente fallido del PRI en Veracruz; posteriormente, siendo diputado federal plurinominal todavía priista, pero no soportó ver llegar como candidato a su némesis y antiguo ex amigo del alma, Fidel Herrera Beltrán, en 2004, y renunció al tricolor; para 2010, ya convertido al panismo, intrigó al candidato natural Gerardo Buganza Calderón con el presidente Felipe Calderón y logró arrebatarle la candidatura a la gubernatura, pero perdió ante Javier Duarte de Ochoa.
Finalmente logra su cometido en 2016 tras el desastroso gobierno de Duarte de Ochoa, pero sólo duró dos años por una reforma electoral que el hoy convicto hizo con miras a colocar a su amigo Alberto Silva Ramos como sucesor; este movimiento causó la segunda gran debacle del PRI, pues la militancia se fracturó y no apoyó al candidato Héctor Yunes Landa, quien también tuvo una muy mala campaña.
Es curioso, pero estos dos años de mini gubernatura que Duarte decretó, sirvieron como una muestra de la arrogancia y pésima administración de Yunes Linares, quien pasará a la historia como uno de los gobernadores cuya soberbia lo rebasó, como el que ocultó cifras y verdades, persiguió a enemigos políticos, pero nunca resolvió asuntos prioritarios como seguridad, empleo y salud.
En general todos se dieron cuenta que no había proyecto real de gobierno sino familia y patrimonial; en pláticas de café con políticos y empresarios, muchos coincidían en que si hubiesen sido 6 años de Yunato, muchos sectores se habrían ido a una crisis peor que la que dejó Javier Duarte. Por eso también falló el intento de colocar a su hijo en la gubernatura: todos coincidían en que 6 años con el hijo de Yunes (de quien dicen, es peor que el padre) no los iba a aguantar nadie.
Y ahora sí, el contendiente a la gubernatura que era un perfecto desconocido en el 2016 con el recién estrenado partido MORENA, un diputado federal por Xalapa a quien todos conocieron el día que le puso una rastriza en la capital de Veracruz a los partidos tradicionales, le ganaba la gubernatura con una votación histórica en 2018.
Ese xalapeño era Cuitláhuac García Jiménez.
(En este sentido, así como Yunes se sacó la espina al derrotar al Duarte que le ganó la gubernatura en 2010, Cuitláhuac se la reviró históricamente a Yunes quitándole la gubernatura a su hijo, lo que le removió sentimientos hasta de llanto al originario de Soledad de Doblado, tanto que buscará colocar a su retoño en 2024).
Madrugada como de año nuevo
Este 1 de diciembre tuvo muchas situaciones inéditas: es la primera vez que un gobernador toma protesta en el primer minuto de su mandato constitucional para inmediatamente declarar crisis humanitaria por la violación a los Derechos Humanos.
Cuitláhuac García Jiménez, ya elegido como gobernador, dedicó sus discursos del Congreso del Estado y en la Plaza Lerdo a los colectivos que buscan a familiares desaparecidos. En este sentido, anunció la creación de la Comisión Estatal de Búsqueda, que tendrá recursos y una Policía especializada para apoyar a estos grupos. Otro hecho inédito.
La toma de protesta del gabinete también fue en los primeros minutos de este sábado, que reunió una buena cantidad de gente en la Plaza Lerdo, aunado a la convocatoria que realizaron comerciantes agrupados en la organización Empresas SOS, quienes organizaron una verbena popular donde se regalaron antojitos, tamales, chocolate, atole, etc., a los asistentes en el Centro Histórico.
Y si tomamos en cuenta también a la historia que se liga con los actores políticos del reciente pasado y nuevo presente, quien también llega a tener un revire histórico como luchador de izquierda es el ex diputado del PRD Atanasio García Durán, padre del hoy gobernador, quien logra ver a su hijo abanderando a la verdadera izquierda que hace mucho dejó de ser el Sol Azteca.
Habrá que destacar que Xalapa parecía que estaba viviendo el Año Nuevo por adelantado, con tintes de la celebración tradicional del Grito de Independencia. Mucha fiesta, baile, ánimo festivo. Y sí, también el tradicional tráfico de la chingada.
Así inicia la era Cuitláhuac, con muchas expectativas, situaciones ajenas de la política tradicional y en medio de una gran popularidad. A ver qué nos depara en el camino. Que todo sea para bien.
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Fiel a su investidura, el que nadie peló a su llegada al Congreso del Estado, fue al alcalde de Xalapa, Hipólito Rodríguez; pasó, como siempre, desapercibido y ahora parece que ni los de su partido lo saludan. Ni Más-asno lo acompañó para tomarle la mano.
OTRA NOTA: ¿Por qué la diputada Ana Miriam Ferráez no bajó de su curul para ir a saludar al gobernador Cuitláhuac García Jiménez cuando casi toda la bancada fue personalmente a darle a un abrazo? ¿Será que todavía anda deprimida luego de la regazón de la semana pasada por andar dando clases de diplomacia internacional?
LA ÚLTIMA PORQUE NO HAY PAPEL Y VOY AL OXXO: Comenzaron bien con la logística de los eventos tanto en el Congreso del Estado como en la Plaza Lerdo. No hubo desfiguros, ni arranques, ni represiones, etc. Hubo también mucho respeto al trabajo de las periodistas y los periodistos. Bien por eso, buena organización.
@pablojair