Boca del Río, Ver.- La inundación que se registró en el municipio de José Azueta por el desbordamiento del río Tesechoacán afectó unas tres mil hectáreas del cultivo de caña de azúcar a semanas del inicio de la zafra 2018-2019, lo cual perjudicó a la economía de unos 12 mil productores.
Ángel Alfonso Caldela, habitante de la localidad denominada Manzanillo, perteneciente al municipio de José Azueta, consideró que la caña de azúcar que se logre rescatar provocará una merma del 50 por ciento en la producción, pues los inspectores del ingenio San Cristóbal rechazarán un porcentaje considerable del corte.
Incluso, no descartó que el inicio de la zafra se retrase por la inundación que se registró a finales de octubre y que según autoridades estatales afectó a más de 150 mil hectáreas de la Cuenca del Papaloapan.
“Ahí es la zona cañera, por lo menos son tres mil hectáreas de caña afectadas, se irá como un 50 por ciento de la caña, la zafra empezará ya tarde, programaron que iniciaría en noviembre, pero no se va a poder, nunca se ha podido por el tema de las inundaciones (…) Mucha caña que se pudre, que se seca, ya no la quiere el ingenio, aunque se corte, llega el inspector y todo lo malo lo saca y ya merma”, subrayó.
El entrevistado pronosticó una crisis para los productores cañeros de José Azueta, pero también para los de municipios circunvecinos a los cuales afectó el desbordamiento del río Tesechoacán.
Además, comentó que otros productores perdieron sus sembradíos de maíz.
Ángel Alfonso reconoció que se padecerá la falta de trabajo y, en consecuencia, que no se cuente con los recursos para el sustento diario de las familias.
“No hay trabajo, ¿de qué come la gente? Eso es lo que nos preocupa, no nos queda más que pedir”, agregó.
Cabe mencionar que Ángel Alfonso Caldela y otros habitantes de Manzanillo acudieron al mercado Malibrán a recabar verduras y frutas y despensas al Ilustre Instituto Veracruzano para llevarlas a las familias damnificadas en su localidad.
José Juan García/Avc