Un equipo de científicos del Hospital General de Massachusetts y la Escuela de Medicina de Harvard, utilizando células adultas de la piel, han conseguido regenerar tejido funcional del corazón a partir de andamios estables, según publican en un reciente estudio en la revista Circulation Research.
Un corazón que late
Los órganos tienen una arquitectura particular. Es más fácil cultivarlos en el laboratorio si tienen un andamio sobre el cual pueden construir las células. Los investigadores tomaron células adultas de la piel y utilizaron una nueva técnica con ARN mensajero para convertirlas en células madre pluripotentes, las células que pueden especializarse en cualquier tipo de célula en el cuerpo humano y luego inducirlas a convertirse en dos tipos diferentes de células cardíacas.
Durante dos semanas, infundieron a los corazones una solución nutritiva y les permitieron crecer bajo fuerzas similares a las que estarían sujetas un corazón dentro del cuerpo humano. Después de esas dos semanas, los corazones contenían un tejido bien estructurado que se parecía a los corazones inmaduros; cuando los investigadores dieron a los corazones un choque de electricidad, los corazones comenzaron a latir.
Si bien esta no es la primera vez que se cultiva tejido cardíaco en el laboratorio, es la investigación más cercana a su objetivo final: desarrollar un corazón humano en pleno funcionamiento. Pero los investigadores admiten que no están del todo listos para hacerlo. Próximamente, planean mejorar el rendimiento de células madre pluripotentes, encontrar una manera de ayudar a las células a madurar más rápidamente y perfeccionar las condiciones corporales en que el corazón desarrolla.
Con información de Xataka Ciencia