La relación entre filosofía y literatura, los paralelismos de la filosofía náhuatl y la griega, así como el indigenismo en el país, fueron los temas de la Mesa 2 “Historia de las ideas en América Latina” del IX Congreso Internacional “Filosofía Latinoamericana Hoy”, cuya sede es la Universidad Veracruzana (UV).
Esta actividad se desarrolló en el Salón Blanco de la Unidad de Humanidades, el miércoles 3 de octubre. Fue moderada por el académico e investigador de la Facultad de Filosofía, Víctor González Osorno e inició con la participación del académico, también de esta casa de estudios, Bladimir Reyes Córdoba, quien habló de “Filosofía y literatura: dos formas de conocimiento”.
Luego de hacer un esbozo por obras literarias y filosóficas, como Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes Saavedra –que inicia la novela moderna, pero también anticipa la filosofía moderna–, citó al intelectual Carlos Oliva, en relación con la filosofía y la literatura en América Latina (AL): “Una de las constantes del relato latinoamericano es ‘donde un personaje se construye, ahí se le debe destruir’; algo similar, pero más cruel y real se puede decir de la filosofía latinoamericana ‘cuando una teoría emerge, se le debe soslayar, hasta volverla pueril’ ”.
Para él, la filosofía y literatura siempre convergen y son necesarias; incluso, para hacer un estudio literario a profundidad se debe recurrir a la filosofía; pero también sucede a la inversa y citó a Georg Wilhelm Friedrich Hegel, que al ser un filósofo complicado de leer, muchos recurren al uso de la metáfora para comprenderlo y ésta es una herramienta propia de la literatura.
Enseguida, el estudiante de la UV Elías Juan Luna expuso “Paralelismo entre la filosofía náhuatl y la filosofía griega: elementos de la filosofía náhuatl para la inserción de un país más armónico”, cuya referencia fue el aspecto ético-moral y la educación de ambas filosofías.
Dio detalles de la educación que recibían los nahuas en el calmecac (centro educativo para la familia de la nobleza y sacerdotes) y en el telpochcalli (para el resto del pueblo), la meta que tenían en términos educativos y cómo ésta se asemeja a la de los griegos, para lo cual tomó como referencia La República de Platón.
“La educación que recibían los nahuas tanto en el calmecac como en el telpochcalli era buena”, explicó Elías Juan; “en nuestro país podría ser destacable la inserción de una mayor ampliación de horizontes intelectuales en todas las clases sociales, sin distinción alguna, como lo realizaban los más altos sabios en aquellos centros de educación”.
Finalmente, el estudiante Manuel Flores Luna habló de “El indigenismo en México (generación de 1915)”. Recordó que desde el inicio, el mundo indígena estudió el pensamiento eurocentrista y que el momento más radical de esta población es en la Revolución Mexicana, donde reclama su lugar en la nación.
Enseguida, habló de José Vasconcelos y la teoría de La raza cósmica, obra que si bien es “utópica” también suena “esperanzadora” para que sea posible una convergencia de “todas las razas del mundo”.
“Suena bastante conmovedora y esperanzadora la teoría de las razas de Vasconcelos; sin embargo, no considero posible su efectividad. Para empezar, el indigenismo es para los indígenas y no del indígena, siempre por fuera del que construye el mundo del indígena; además, existe distancia entre los metropolitanos y los rurales.”
Karina de la Paz Reyes/Prensa UV