«Le dio chorro al Chiquito de Yunes»: para titular de Notiver
–Chopenjawer editor
A estas alturas creemos que el peor enemigo de la candidatura de Miguel Ángel Yunes Márquez al Gobierno de Veracruz fue su propio padre, el gobernador.
Y es que el haber ganado la gubernatura con la promesa de un «cambio» para luego evidenciar que sólo se trataba de un vulgar proyecto familiar de por lo menos 14 años para establecer un cacicazgo, no se lo perdonaron los veracruzanos.
El gobernador Yunes Linares, hinchado de soberbia, creyó que los veracruzanos le avalarían la osadía de dejar a su hijo, cuando en la cultura mexicana el nepotismo es una de las prácticas más repudiadas por el electorado. De hecho, la votación histórica de este domingo 1 de julio de 2018 demuestra que la gente salió a votar masivamente para mostrar el rechazo a los excesos del poder, como el caso de Yunes y su plan por dejar a sus hijos en Palacio de Gobierno.
No obstante, fue una gran sorpresa el que Yunes Márquez perdiera la gubernatura porque varios dábamos como un hecho que su padre el gobernador iba a utilizar todos los recursos a su alcance (hasta el fraude y la violencia) para imponer a su hijo. Los Yunes azules tenían literalmente todo a favor: dinero, recursos, programas sociales, policía, grupos de choque, información, personal, etc. Todo lo tenían los Yunes para ganar, pero algo les falló.
Es de todos conocido (menos para los que creen en los Yunes) la historia de 1997, cuando el hoy gobernador y entonces presidente del PRI estatal tuvo aquella gran debacle cuando el tricolor perdió la mayoría de las alcaldías en Veracruz, lo que demostró en ese momento que Yunes será muy entrón y sacalepuntas, pero que no es propiamente un estratega electoral. La derrota de este 2018 lo confirma como tal: es el peor para esa materia.
Y es que se confirma que a Yunes sólo le favorecieron las circunstancias del momento para abrirse paso hacia Palacio de Gobierno; tuvo enfrente a un enemigo fácil de vapulear y con una larga cola de señalamientos. Javier Duarte efectivamente no estaba a la altura de alguien con la experiencia en mañas que sí tiene Yunes, pero no confirma al gobernador como el gran estratega. Solamente se ensañó con alguien que no podía defenderse, no tenía la malicia y sólo estaba más dedicado a enriquecerse.
En este sentido, Yunes Linares quizás creyó entonces que había destruido todo un partido y un grupo en el poder, pero eran enemigos fáciles de digerir para sus ansias de venganzas; quizás pensó que eso le bastaba para plantar su bandera en Veracruz, pero hay muchos que no le creemos su manera particular de hacer «justicia», menos cuando puso a un bufón como Fiscal General del Estado.
Otro punto negativo para Yunes Márquez y su padre es que se confiaron demasiado de las redes sociales; desdeñaron a la prensa, a los medios tradicionales, y pensaron que pagando publicidad en Facebook (sin transparentar los gastos públicos) era suficiente para ganar una elección. Tal y como decían los detractores de AMLO, los bots no votan… Y por eso hubo una copiosa votación, una participación de arriba del 65% en Veracruz (muy alta), que nada tiene que ver con los «miles» de lameesos y huelegases que tiene el gober en Feisbuc.
Tan mal estratega fue Yunes Linares, que pensó que jalando de la bancada de MORENA en el Congreso local a Sebastián Reyes Arellano y a July Sheridan ya tenía ganado los distritos de Coatzacoalcos y Minatitlán, como si los dos personajes representaran algo. El mismo caso fue con Eva Cadena (que hasta libro patito le hicieron) y el remedo de cacique Renato Tronco, porque lo que sí sabía Yunes es que el bastión principal de MORENA y AMLO es el sur de Veracruz, donde el gober y sus hijos nomás no funcan, pero escogió mal a sus aliados.
Por lo anterior, queda claro que Yunes ni siquiera parece haber tenido claro si todos los personajes mencionados en el anterior párrafo le iban a representar votos o por lo menos servirían para restarle a López Obrador y a su movimiento. Fueron, a lo mucho, impactos mediáticos de medio pelo y ya.
Pero no sólo era propaganda y ruido, a Yunes Linares se le olvidó gobernar, y Veracruz le recordó que prometió acabar con la inseguridad en 6 meses y que iba a poner a un militar de alto rango en Seguridad Pública, lo que finalmente nunca cumplió. Otro sector ofendido por los desplantes de Yunes (y las payasadas de su Fiscal) fueron los familiares de desaparecidos, a quienes utilizó como bandera de campaña para luego olvidarlos.
Otro sector que sin duda también pesó fue el de los burócratas. Muchos fueron despedidos o sobajados por los nuevos jefes traídos por los Yunes a las diferentes dependencias del Gobierno del Estado. En recientes fechas circularon mensajes de Whatsapp donde personal de SSP, Salud, Educación, etc., estaban en contra de la manera en que eran utilizados para ser acarreados en la campaña del hijo del gobernador o incluso amenazados para que apoyaran con todo al «Chiquito».
Tampoco hay que olvidar las alianzas con personajes que prometió meter a la cárcel como los García de Pánuco o los Picazo de Coyutla. En lugar de perseguirlos, los hizo sus aliados y amigos.
Y así, varias cosas…
Hay que dejar en claro que si MORENA arrasó en el país y Veracruz fue precisamente por el Peje, ahora presidente electo, y quien en tierras jarochas fue insultado por Yunes y sus hijos, quienes no lo bajaban de «loco» o «viejo guango».
Fue en realidad un día histórico… ¡Ay viejito! ¡Si hubieras aguantado unos años más verías tu sueño hecho realidad de ver a la izquierda tomando el control del país! ¡En verdad que estarías feliz, Don Nico!
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Por la mañana llegó en su silla de ruedas, todo enfermito; recibió mentadas de madre, insultos y se veía todo desmejorado. Por la madrugada debe haber estado bailando danzón con «Perfume de Gardenias», así como si nada, muerto de la risa y a carcajadas.
OTRA NOTA: El «Chiquito» siempre decía que iban a arrasar, pero los que arrasaron fueron los de Morena. Hasta la madrugada tenían 25 diputaciones locales y 5 para el PAN. El Senado también fue para Morena. Literalmente, el Yunismo (que no el panismo) fue borrado casi en su totalidad, a excepción de su zona de influencia en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
LA ÚLTIMA PORQUE YA NO HAY LEY SECA: Desapareció del mapa el PRI. Ni el Senado, ninguna diputación federal ni local hasta el cierre de esta edición, al menos en Veracruz. A ver si ahora en lugar de querer engañarse a sí mismos se ponen a chambear ahora sí con gente que trabaja, son verdaderos líderes sociales y no andan vendiendo espejitos. Es una labor titánica y sin duda alguien deberá tomar las riendas. Hay mucho por hacer y muchas rémoras por deshacerse.