Es una recomendación, una súplica, una petición respetuosa que les hago: no poner, aunque TRIFE lo avaló, cosas raras en la boleta electoral, simple y sencillamente cruzar con la X el recuadro del candidato o candidata que vayamos a favorecer, y punto.

Preocuparnos por simplificar algo que podría parecer tonto, no lo es, es muy importante, recordemos que el conteo de votos para llenar actas en cada casilla podría atrasarse, si hubiera que diferenciar los votos válidos de los inválidos cuando la voluntad ciudadana se haya expresado mediante un apodo u otra marca que no sea el tachado con la cruz; votar sencillo ayudará a agilizar el conteo y daría certeza sobre los votos válidos de los que no lo son. En Veracruz tenemos un ejemplo claro, dos candidatos de mismo apellido, en una perspectiva más compleja ¿qué pasaría si ponemos «bodoque»?, ¿lo toman como voto en favor del bodoque de AMLO o el bodoque del gober?.

Es mas, el conteo podría darse más rápido de lo esperado, a diferencia de quienes dicen que no; las actas que surjan de las casillas ahora podrían enviarse de manera digital mediante una fotografía y así se brincaría el traslado terrestre o se evitaría el riesgo de alterarla, en cierto sentido porque no falta quien asegurare que las fotografías pueden alterarse.

El INE y su vocal ejecutivo en Xalapa, Josué Cervantes, aseguran que hay condiciones para votar y que la elección será vigilada no solamente por los partidos, debemos recordar que hay otra gran cantidad de voluntarios que son observadores ciudadanos que vigilarán la elección, además de observadores enviados por la Organización de Estados Americanos al estado de Veracruz, quienes ya tienen su respectiva acreditación y darán fe, como instancia internacional, sobre el desarrollo de la jornada. Es decir, hay una larga cadena de confianza desde que ustedes depositen las boletas en las urnas hasta el cómputo de los votos, lo que no está asegurado como, lo dijimos ayer, es la compra de votos; me refiero a las viejas nuevas prácticas, lo mejor de lo peor que han adoptado los funcionarios del cambio con tal de seguir ganando un salario seguro porque saben que por fuera la cosa está muy difícil, a menos que se vuelvan prósperos constructores.

Además, si durante la jornada ustedes notan algo raro y quieren interponer una denuncia les tengo una noticia, tenemos la obligación de hacerlo y cualquier instancia de investigación está obligada a actuar. No importa si son faltas administrativas o un verdadero delito electoral, cualquier Ministerio Público, cualquier autoridad investigadora sin importar si es federal o local debe dar entrada a las denuncias, la ley les obliga a hacerlo y a canalizarlas posteriormente a la instancia correspondiente; así que por si las moscas, podemos denunciar sin necesidad de pertenecer a un partido o ser funcionario de casilla, seguramente ya lo sabían pero estamos hablando de la jornada electoral más grande en la historia de México y debemos cuidarla para al rato no quejarnos de que no hicimos lo correcto en el momento.

Quien debe amanecer el lunes dos de julio como ganador, el día después, es el país; ya vendrán los nuevos gobiernos, pero la lección deberá quedar en la conciencia de cada uno de nosotros.

Hablando de el día después, pude platicar con el columnista de EL Universal Emilio Lezama, él es parte de la iciciativa ciudadana «El día Después», un movimiento que busca construir una empatía social y acabar con la polarización en la que la sociedad vive. Lezama nos comenta que hemos confundido banderas con causas, esa iniciativa trata de formar una masa crítica de ciudadanas y ciudadanos, dejar de caer en el juego de división que le conviene al gobierno, unirnos para exigir y no para confrontar.

Claro que se vale festejar si gana el candidato que usted elija, en lo individual todos tenemos derecho a escoger quien querramos, eso se vale, creer en un diferente programa de gobierno; todo eso no nos hace diferentes, más bien nos nutre como sociedad, nos da pluralidad y una riqueza de perspectivas, lo que nos construye es la idea de no perder las nociones básicas de buen gobierno que debemos exigir que se cumplan aunque seamos diferentes políticamente.

Y para los que digan que vamos a estar embobados con el fut el lunes, con el casi imposible triunfo del equipo mexicano ante Brasil, les pregunto ¿tiene algo de malo?. El juego más importante es el del domingo 1 de julio y hay que afrontarlo con valor ciudadano, ganarlo en la cancha con todo y sus hoyos, hacer nuestro el sistema de juego y no caer en esa bipolaridad de la comentocracia que tanto nos encanta ejercer en redes sociales. Nos sobran argumentos colectivos en lo social y en lo pambolero para salir triunfadores el domingo y el lunes, basta ya de pensar que quien no coincide con lo que decimos o creemos está en mi contra.

Les recuerdo, tenemos cobertura especial el 1 de julio desde las 7 de la mañana en el 88. 9 FM, nos escuchamos.