Luz Valeria Trujillo Viveros, madre de Cristo Fernando, el niño fallecido el 19 junio en el puente peatonal de plaza Américas, exigió la guarda custodia de su hija Diana con edad de 14 años y embarazada, y de su hijo Ángel con edad de 11 años y que viven con el padre, José Antonio Jiménez Martínez.
Luz Valeria acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE) para interponer la demanda porque no quiere que otro de sus hijos muera a causa de la irresponsabilidad de su padre.
“No estoy pidiendo dinero, lo único que quiero es que me entreguen a mis hijos para sacarlos adelante, no tienen porque andar pidiendo dinero. Quiero la custodia de mis hijos para echarle ganas y sacarlos adelante” dijo.
Señaló que el niño con edad de siete años, Cristo Fernando lo vio por última vez en mayo pasado y él se lo regresó en su ataúd.
“Lo que él está diciendo son mentiras, porque él ha dicho que los niños no tenían madre y si tienen, aquí estoy. Yo iba a ver a mis hijos y él me corrió muchas veces con groserías, pero siempre les lleve dinero, se lo dejaba a la mamá de él. Yo lo buscaba y lo buscaba para que me diera mis hijos y él nunca estaba” dijo.
Refirió que durante años ha luchado para que José Antonio Jiménez le regrese a sus hijos, sin que las autoridades investiguen y se den cuenta que el padre no trabaja y los manda a pedir dinero a la calle.
La mujer con edad de 31 años y enferma de los riñones explicó que la separación con el padre de sus hijos fue a consecuencia de la violencia que ejercía contra y ella, y la última vez la familia de él la golpeó.
“Me golpeó muy, muy, muy feo su familia, me dejaron muy mal y ya no aguanté, tuve que huir. Él me amenazaba que donde me viera me iba a matar. La responsabilidad de mi hijo era de él, porque si me los quitó es porque tenía que darles estudios y no mandarlos a pedir dinero, porque yo no sabía que mi hijo pedía” dijo.
La guarda y custodia de las dos niñas y los dos niños, la otorgaron “en juzgados que están frente a plaza Crystal. Ahí un juez se los dejo, todo porque yo trabajaba en un negocio, en un bar, si es verdad, pero mientras yo trabajaba ahí nunca les faltó nada a mis hijos, ni de comer, ni ropa”, explicó la mamá.
La madre de familia vive ahora en otro municipio y cuando se enteró de la tragedia llegó a Xalapa para el velatorio del cuerpo de su hijo y la sepultura.
“Yo fui al puente, para ver por qué le paso eso a mi hijo. Y la gente me decía que era un niño que se la pasaba pidiendo dinero. Mi niño andaba lleno de piojos” expuso.
Luz Valeria expuso que la fotografía mostrada por el padre en una conferencia de prensa ofrecida el pasado lunes por el padre, la tomó ella cuando le compró la camisa color azul y los zapatos.
“Cortando café le compre la ropa a mi niño, y a mis otros hijos también les traje ropa, porque a eso me dedicó ahora a cortar café. Yo no quiero dinero, quiero mis dos hijos que todavía tiene él, porque el dinero que él anda pidiendo no sirve para nada, ese dinero no me va a devolver a mi tesoro”, finalizó.
Verónica Huerta/Avc