Ante la decisión del gobernador Miguel Ángel Yunes de retirar el armamento a la policía municipal, el senador Héctor Yunes Landa respondió que ni el alcalde Bogar Ruiz Rosas ni Alvarado están solos.

Únicamente los gobiernos fascistas utilizan a la policía y a las fuerzas armadas para ganar elecciones, acusó Yunes Landa luego de hacer público su apoyo al alcalde alvaradeño por defender la autonomía del municipio.

Dijo que el mandatario estatal -ante una campaña electoral que nunca levantó-, está utilizando a la Secretaría de Seguridad Pública como su principal brazo electoral. “En medio de su desesperación, tolera a la delincuencia y rechaza la presencia de las fuerzas federales para operar electoralmente en municipios de oposición, como sucede en Alvarado”, explicó.

Yunes Landa criticó que el gobernador carezca de autoridad moral para señalar a policías municipales. “La incidencia delictiva en Veracruz es una de las más altas en el país y la violencia está en su punto más crítico en los últimos años”, por lo que responsabilizó al gobierno de Yunes Linares por la presencia de la delincuencia organizada en aquéllos lugares donde ha relevado a la policía municipal.

Lamentó que Veracruz se convierta otra vez en nota nacional. La decisión del alcalde Bogar Ruiz Rosas de armar con resorteras a su policía municipal es un llamado de auxilio para que se respete la autonomía municipal de Alvarado. “La derrota electoral del Gobernador seguramente traerá más violencia política contra otras autoridades, legisladores y actores políticos”, anticipó.

Refirió que el gobierno actúa de manera selectiva en materia de seguridad pública; puso en ejemplo el municipio de Martínez de la Torre, donde en días pasados policías estatales y municipales fueron detenidos por sus propios compañeros luego de realizar una serie de robos a comercios, mientras que en Alvarado se justificó que no se habían realizado exámenes de control de confianza. “La diferencia en estos casos es la relación de complicidad del alcalde martinense con el Gobernador”.

“La decisión de desarmar únicamente a la policía municipal de Alvarado es un acto de intimidación política que observaremos en otros municipios en los días previos a la elección del domingo, sobre todo en aquéllos contrarios a su intención de imponer a su sucesor”, insistió.

En Veracruz, agregó, se ha implantado una autocracia, una forma de gobierno en el que el poder se encuentra en manos de una autoridad arbitraria, cuya voluntad es la ley suprema. Los veracruzanos padecen la concentración absoluta del poder en el aparato del Estado, con lo que el Gobernador intenta controlar todas las actividades públicas, incluso de las autoridades municipales, concluyó.