El accidente que causó la muerte de Cristo Fernando en el elevador de Plaza Américas se debió a una falla mecánica de esta estructura, reveló el abogado Gabriel Salas.
En conferencia de prensa, indicó que los peritajes de la Fiscalía General del Estado (FGE) revelan que es posible que exista una responsabilidad de la plaza por el manejo de este elevador y que por ello buscan que se llegue al fondo de este caso.
«El elevador falló, le pudo haber pasado a cualquier niño, pudo haber sido un mayor o alguna persona menos vulnerable, pero fue una situación de negligencia y hay responsabilidad penal y civil».
Por ello, aseguró que la plaza podría ser responsable incluso de homicidio doloso, y que la reparación del daño podría ascender hasta a 5 mil salarios mínimos.
Sobre las críticas que ha recibido la familia por la ausencia de un adulto para la vigilancia de los menores, el abogado aseguró que Cristo salió de su hogar «como muchos niños lo hacen» a jugar en el elevador de plaza Américas.
Además, culpó a los medios de comunicación de mal informar a los ciudadanos y que ha provocado la revictimización de los familiares del menor.
Negó que el niño de ocho años se dedicar a pedir limosna en la calle o que viviera con omisión de cuidados como se ha dicho en algunos medios de comunicación.
Dijo que si bien su familia es de muy bajos recursos económicos, su padre se dedica a recolectar material de reciclaje y con ello mantiene a su familia.
El abogado aseguró que hasta el momento no existe una investigación por omisión de cuidados por parte de la familia, y que hasta ahora la Fiscalía General del Estado no ha informado que exista la intención de hacerla.
Perla Sandoval/Avc