Prefacio.
Es un tema en el que ha insistido durante toda su campaña Pepe Yunes: “No se confundan, ya hace dos años pensaron que no podíamos estar peor, y hoy lo estamos”. *** Este fin de semana el periódico Reforma ubicó a Veracruz como la entidad que peor herencia habrá de dejar al próximo gobernante. De los nueve estados que elegirán Gobernador este año, la administración de Miguel Ángel Yunes Linares destaca porque no mejoró los índices de seguridad, ni en el combate a la corrupción, ni en la reducción de la deuda. *** Este rotativo destaca que en sus dos años al frente del gobierno, Yunes Linares no pudo erradicar la inseguridad ni la violencia. *** Hasta el primer trimestre del 2018, el 51.5% de la población de Veracruz con un ingreso laboral, no podía comprar los productos que integran la canasta básica. Esa cifra es peor que el 49.1% que se registraba en el 2010, al inicio de la administración de Javier Duarte. Además, el 23.1% de los trabajadores en Veracruz perciben un salario mínimo al día, cifra que duplica la media nacional. *** En el 2017 se registraron en Veracruz 3 mil 367 víctimas de homicidio, secuestro y extorsión, lo que representa más del doble de los mil 548 reportados en 2014, cuando gobernaba Javier Duarte. *** Veracruz ocupa el lugar número 8 entre las entidades con mayor informalidad laboral, pasando en 2011 del 65.35% al 69.1% de la población en 2017. Yunes Linares heredará al quinto Estado con mayor deuda pública, que creció del 3.7 al 4.5% del PIB estatal.*** En Vega de Alatorre, Pepe Yunes tuvo este domingo un cierre regional. Ahí les dijo a los presentes que a lo largo de los últimos dos años y quizá desde hace muchos tiempo atrás, el Gobierno del Estado no ha hecho causa con la gente, no se ha hecho sentir en las actividades que le interesan. *** “El primer indicador de esa circunstancia es que no avanza nuestra economía, sobre todo en la región. Y porque eso sucede es que no podemos hacer frente a nuestras necesidades básicas”. *** Estábamos mal, hoy estamos aún más mal, pero si nos volvemos a equivocar, a partir de diciembre podríamos estar peor. Ustedes deciden.
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Miguel Ángel Yunes miente. Y lo hace con extraordinaria frecuencia.
Es una técnica que domina y con la que ha conseguido ese poder económico y político que hoy posee.
Yunes Linares sabe del valor de una mentira lanzada en el momento oportuno y ante la audiencia precisa. En tiempos electorales, en 2016, a él le funcionó muy bien. El embuste que más recuerdan los veracruzanos fue aquella promesa de recuperar la paz en la entidad en seis meses (“ingenuos” llamó después su hijo Miguel Ángel, hoy candidato a sucederlo, a los que le creyeron).
Y mintió cuando exageró el déficit presupuestal encontrado en diciembre del 2016, con el fin de hacer más resonante su “rescate financiero”.
Y mintió cuando prometió a los veracruzanos que acabaría con la corrupción y metería a la cárcel a todos los que saquearon las arcas del Estado. No sólo negoció con algunos de ellos, permitiéndoles que siguieran gozando de los beneficios de su rapiña, sino que incorporó a su equipo a nuevos corruptos, y él mismo ha estado haciendo jugosos negocios que le han permitido acrecentar su fortuna y destinar fondos sin fin para su proyecto monárquico.
Miguel Ángel Yunes Linares es tan mentiroso como lo es su más odiado enemigo, Fidel Herrera Beltrán, aunque hay una gran diferencia entre ambos: Cuando miente, el nativo de Nopaltepec busca convencer a su interlocutor, entiende que la mentira funciona mejor si quien la pronuncia goza de credibilidad.
Yunes Linares, en cambio, miente con desfachatez, con cinismo, sin importarle si quien escucha le cree. Desde su postura egocéntrica, el solo hecho de que él lo haya pronunciado, debe ser suficiente para que se tome como cierto.
Su más reciente joya del engaño, fue ese viaje (jet privado y hospedaje de lujo para él y su comitiva, a cuenta del pueblo veracruzano) a Houston, Texas. El gobernador dijo haber acudido a atestiguar (no hay otra explicación de su presencia, pues él no es fiscal ni juez) la entrega de inmuebles que habrían sido adquiridos con el producto del saqueo a las arcas estatales.
Yunes Linares y su secretario de Gobierno, el perredista Rogelio Franco, viajaron a Estados Unidos y transmitieron por redes sociales su recorrido por Woodlands, un suburbio de Houston, de buen nivel económico, sí, pero muy lejos de estar ubicado entre los cinco más caros de esa zona.
Mostró una residencia y la presentó como “una de las que adquirió Javier Duarte”. Mintió pues -según la investigación realizada por el noticiero de Ciro Gómez Leyva, en Imagen- dicho inmueble está a nombre de Sofía Lizbeth Mendoza Hernández, esposa del exsecretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez.
En el video exhibió unos documentos que, dijo, eran las escrituras de dicho inmueble que, afirmó, estaba valuado en más de un millón de dólares.
Volvió a mentir, pues esa propiedad sigue en litigio (no es, por lo tanto, propiedad del Estado de Veracruz) y las inmobiliarias de aquel país le atribuyen un precio que no llega a los 900 mil dólares.
¿Tú le crees?
Yo no.
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Epílogo.
¿Quieren otro ejemplo de los embustes del gobernador? De forma unilateral ordenó el retiro de los policías municipales de Alvarado, con el argumento de que no habían pasado los controles de confiabilidad y que “posiblemente” no contaban con permiso de la Sedena para portar armas. Al ser cuestionado por la prensa por la falta de información al Presidente Municipal, el gobernador respondió que este “no tenía porqué tener conocimiento de este operativo, pues se trata de un protocolo establecido por la ley”. *** Miente: La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, nuestra Carta Magna, establece en el Artículo 115, Fracción III, que entre las atribuciones que son propios del Municipio se incluyen la seguridad pública, la policía municipal y tránsito. Hace tiempo que se estableció que ya no se refieran al gobierno federal, los estatales y los municipales como “niveles de gobierno”, sino que se refieran a “órdenes de gobierno”. No hay uno con mayor o menor jerarquía que los otros. Por lo pronto el alcalde de Alvarado, Bogar Ruiz, dotó a sus policías de resorteras y piedras, sí, así como lo oye, aunque aclaró que su mejor arma es la credencial de elector, y la utilizarán el primero de julio. *** Y mientras el gobernador deja sin policía municipal al municipio de Alvarado, en el sur, en Acayucan, la mañana del domingo fueron encontrados los cuerpos sin vida de dos hombres de entre 30 y 35 años de edad, maniatados, con visibles huellas de tortura y con varias heridas de bala, incluída las de tiros de gracia. *** Y en el río Coatzacoalcos fueron encontrados los cadáveres de tres hombres, durante el fin de semana. Las víctimas presentaban avanzado estado de descomposición y fueron ubicadas a la altura del lugar conocido como “El Infiernillo”. Sólo uno de ellos ha sido identificado. Se trataba del joven Sebastián Alpuche Gómez, conocido deportista de Nanchital. Se supo que esta persona fue privada de su libertad hace una semana, su familia habría pagado el rescate, pero la víctima fue privada de la vida. *** Y allá en Coatzacoalcos, la candidata de Nueva Alianza a la gubernatura, July Sheridan continuó con sus recorridos y expresó: “Quiero ser gobernadora de Veracruz porque soy una mujer nacida de una familia de trabajo, no de una familia de políticos, vengo desde abajo, he crecido económicamente conforme han pasado los años. Ya es momento de que los ciudadanos levantemos la voz”. July Sheridan recalcó que en materia de seguridad se deben enfocar más las baterías a combatir los delitos del fuero común, toda vez que son los que más impactan a las familias veracruzanas, pero también se debe continuar con la depuración de los cuerpos policiacos.