Jóvenes egresados de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana (UV) participaron por segunda ocasión con un cortometraje dentro del programa de actividades del Festival de Cine de Cannes, en Francia.
En la categoría de Short Film Corner 2018, donde se exhiben cortos de todas partes del mundo, los veracruzanos presentaron Demasiado joven, obra que retrata la violencia imperante en México desde una perspectiva distinta.
Al comentar respecto del origen de la pieza, Xavier Aguirre Couttolenc, director, guionista y compositor de la banda sonora, compartió que en 2015, cuando llevó el cortometraje Génesis a participar dentro de la misma categoría, percibió un olor putrefacto mientras caminaba cerca de un terreno baldío.
“Mi cabeza comenzó a maquinar qué sería eso, ¿una rata, un perro? Me interesó que la idea base del corto fuera lo que pasaría si una persona se encuentra un cadáver. De vuelta a México comencé a trabajar en esto pero lo que más me causaba intriga era quién se iba a encontrar el cadáver; a partir de ahí comencé a desarrollar un personaje y la riqueza narrativa que le podría dar a la historia era con un menor de edad, un niño con el que podría comparar dos ideas: por un lado, la juventud y por el otro, la muerte”.
A esta imagen se sumó mostrar el entorno de la violencia, tomando en cuenta el contexto social inmediato, “la idea se fue transformando hasta quedar en la historia de un niño cuyo padre trabaja con el crimen organizado y manda a su hijo a un rancho donde se llevan a cabo estas acciones, el cortometraje narra un día en la vida de este niño en el que descubre cuál es el trabajo de su padre”, puntualizó el realizador.
Desarrolló el guión durante un tiempo y se reunió con el equipo que realizó el corto anterior al que se sumaron nuevos integrantes y comenzaron a planear la grabación, considerando las locaciones y los tiempos libres de todos ellos.
En agosto de 2016 inició el rodaje en los lugares elegidos de la región de Las Vigas y al finalizar siguió la postproducción que abarcó seis meses.
Armando Pérez Galicia Pugliese, asistente de dirección y editor, recalcó que “algo importante sobre el cortometraje y la historia es la manera en la que quisimos contarla; no caer en la clásica narración de eventos relacionados con el crimen organizado sino enfocarse en lo que sucede después y cómo impacta en la cuestión personal y la cuestión familiar, cómo este niño se ve envuelto en este mundo a partir de su padre y su relación familiar. Él se encuentra atrapado en esa situación y no puede escapar, la historia trata de hacer énfasis en eso, cómo se vive la experiencia; más allá de hablar de la violencia o de los asesinatos nos está hablando de un niño que se enfrenta de manera directa, de manera cruda a un suceso y no tiene opción”.
Explicaron que el tema de la violencia fue una herramienta narrativa, no un elemento principal, porque la intención es que el público se haga más preguntas y vaya más allá del hecho violento.
“Al plantear esta historia creemos que se generan más preguntas sobre el personaje y se empiezan a inmiscuir en lo personal, creo que es lo esencial, sobre todo por lo que estamos viviendo; intentamos presentar un punto de vista empático por las personas que no tienen una salida de este mundo”, apuntó Aguirre Couttolenc.
Jenny Camacho Báez, productora y directora de arte, reconoció el espíritu de trabajo en equipo que se fue gestando durante la grabación, “de hecho tuvimos que improvisar un retén en la carretera, entre todos cooperamos para llenar los costales y ponerlos en el lapso de una hora, comenzando en la madrugada; lo bueno de esto es que se creó un muy buen ambiente y todos convivíamos”.
Recordaron también que toda la producción estaba preocupada porque, a pesar de haber enviado la solicitud oficial a la Secretaría de Turismo estatal para instalar este retén falso, al día de la grabación no tenían la respuesta oficial y podían detenerlos por un delito federal, que es la obstrucción de las vías de comunicación.
“Todos cooperamos: actores, productores e hicimos varias cosas, hubo mucho aprendizaje en esta realización que tuvo seis meses de postproducción”, recordó Armando Pérez.
Aguirre Couttolenc realizó la música para el cortometraje al finalizar el guión, “es un proceso que siempre he hecho así, el tener la pauta musical sirve para poderme ambientar y planear qué atmósfera va a tener el cortometraje; entonces, antes de grabar ya sabemos en dónde vamos a colocar la cámara, inclusive en la postproducción ya sabemos qué temperatura de color va a llevar, a través de esta atmósfera musical me ayuda a aterrizar y a que los demás sepan por dónde va lo que queremos contar”.
Del cortometraje anterior obtuvieron múltiples experiencias que se convirtieron en aprendizaje, entre las cuales hubo un accidente automovilístico con la producción, del cual salieron bien librados.
“El aprendizaje fue en logística y producción, no apresurar el ritmo de trabajo y hacerlas con tiempo para que no tengamos que hacer cambio de planes, creo que fue eso, el tiempo de producción y que todo estuvo en tiempo”, dijo el director.
Pérez Galicia Pugliese explicó que rodaron en los días establecidos en el calendario, aunque hubo pequeños atrasos no fueron significativos, tomando en cuenta que había un equipo más grande con tareas específicas, “ya estábamos conscientes de que íbamos a apoyar en ciertas cosas”.
El 17 de mayo a las cuatro y media de la tarde Demasiado joven se exhibió en una sala del Short Film Corner, logrando un contacto con el público que se acercó al director para compartir sus dudas y comentarios.
Al día de hoy los jóvenes buscan exhibir la obra en la entidad y a nivel nacional y están gestionando actualmente espacios en el puerto de Veracruz y en Boca del Río, aunque les gustaría incluir Xalapa y otras ciudades.
El avance del cortometraje de nueve minutos puede verse en el enlace de YouTube: https://bit.ly/2tdE1v5.
Los entrevistados refirieron que les gustaría llegar con este cortometraje a una audiencia amplia y diversa, que se genere una reflexión sobre las situaciones de violencia como también sus implicaciones y destacaron que toda la producción, al igual que en su primer corto, fue financiada con recursos propios y a través de los ahorros de sus integrantes.
David Sandoval Rodríguez/Prensa UV