Indira Rosales San Román, coordinadora de campaña del candidato del PAN-PRD y MC a la gubernatura, Miguel Ángel Yunes Márquez, anunció que nueve alcaldes de las regiones serranas pertenecientes al Partido del Trabajo, Encuentro Social y Morena, se sumaron al proyecto de Miguel Ángel Yunes Márquez.
Casi una decena de munícipes chaqueteros no son cualquier baba, y menos si pertenecen (o pertenecían) a una alianza que se supone ganará de calle las próximas elecciones.
Si tienen su futuro asegurado ¿por qué están mandando todo al diablo para sumarse a un proyecto que no termina de cuajar?
Es una excelente pregunta para la que no hubo respuesta porque los involucrados no dijeron ni pio.
Quien sí habló y habló muy claro, fue el alcalde de Huiloapan de Cuauhtémoc, José Gabriel Flores Sarabia, pero para negar que haya abandonado a su partido.
En conferencia de prensa aseguró que sigue con AMLO y Morena y no piensa moverse de ahí. Y en el mismo tenor habló la síndica de Texhuacan, Salustia Anastasio Romero, a la que también andaban embarrando en el ajo.
Lo que llamó la atención es que mientras Indira daba la noticia, los alcaldes guardaron un mutismo parecido al de un grupo de chiquillos a los que acaba de regañar el maestro, por lo que la presunta adhesión cayó en la sospecha.
Tómalo con las reservas del caso, lector, pero hay quienes aseguran que fueron amenazados.
¿Será?
Pues como puede que sí, puede que también. No hay que olvidar que en el equipo del joven Yunes hay especialistas en este tipo de calambres.
Cuando faltan 26 días para las elecciones la lucha por la gubernatura de Veracruz se ha vuelto más enconada y quienes por semanas fueron en punta están perdiendo el sueño.
A Morena no le interesa que ocho de sus alcaldes se hayan pasado a la pista de enfrente a bailar al son que les tocará Yunes Márquez; sino el avance de José Yunes Zorrilla.
A la par, en el war room de Miguel Ángel hijo dejó de preocuparles Cuitláhuac García y están enfocando sus baterías hacia el peroteño. El problema es que no tienen municiones con que tirarle.
El joven panista se estancó y Cuitláhuac sólo avanza cuando lo visita AMLO como lo hará este martes. Pero después se pasma.
Y mientras ambos se hacen bolas Pepe sigue escalando la cuesta.
Por lo pronto, ocho alcaldes de la alianza Juntos haremos historia, se pasaron a las filas del candidato panista.
¿Cuántos votos le abonarán al joven Yunes Márquez?
Quién sabe. No sería la primera vez que en público alguien diga que va a votar por Fulano cuando en la soledad de la urna lo hace por Zutano.
Varios de esos alcaldes saben porque lo vieron, que sus municipios se beneficiaron con los apoyos que gestionó Pepe Yunes como senador y son agradecidos.
Pero de acuerdo con los corifeos de MAYM se pasaron a las filas de Por Veracruz al frente “con plena libertad y sin recibir presiones de nadie”.
Je je je. Ora pues. Nomás hay que ver las caras de funeral que tenían los pobres.